Aunque las obras de remodelación de la Plaza de España comenzaron hace aproximadamente dos meses, los madrileños aún no habían notado los trabajos, hasta ahora que ya se ha procedido a vallar la plaza. En un primer momento, la reforma comenzó por hacer mediciones del terreno, y ahora se han comenzado las obras.

El primer trabajo que se realizará será la adecuación del parking, según informó el pasado mes de febrero José Manuel Calvo, el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible. Esta zona de estacionamiento se construyó en los años 60, por lo que era urgente que se renovara la cubierta. Además, se demolerá toda la galería comercial, para construir un espacio comercial más grande por el que también se pueda acceder al Metro, según informa 20minutos.

Asimismo, se ampliará las aceras que enlazan la calle Princesa con la Gran Vía, donde se va a realizar un paso de peatones transversal por el que se podrá cruzar en todas direcciones, imitando el modelo de cruce de Shibuya, en Tokio (Japón). De igual forma, se peatonalizará el lateral de la plaza donde se ubica la Torre Madrid, y se remodelará el túnel de Bailén.

Las obras, que las llevará a cabo la Unión temporal de Empresas, han supuesto menos de 62 millones de euros al Ayuntamiento de Madrid, y durarán 21 meses, por lo que la nueva Plaza de España debería estar lista a finales de 2020.

La construcción de la nueva plaza permitirá conectarla con Gran Vía, pero también con el Palacio Real y con los jardines de Sabatini, por el sur, por el oeste con el parque de Sabatini, uniéndolo con la zona del Templo de Debod, y por el norte con la calle Princesa, la Plaza de Cristino Martos y los jardines de la Condesa Pardo Bazán y el Palacio de Liria.

Además, se pretende hacer peatonal el paso de Bailén, para conectarlo con los jardines de Sabatini y con el Parque del Oeste. Está previsto plantar unos 1.500 árboles, construir zonas infantiles y carriles bici que enlacen la continuidad con otras rutas para bicicletas.