Con motivo del 12 aniversario de la aprobación de la Ley de Memoria Histórica, Jose Luis Rodríguez Zapatero se ha sincerado. El expresidente ha hablado sobre el posible Gobierno progresista, el auge de Vox y de la exhumación de Franco.
En una entrevista a Público, Zapatero sigue manteniendo su apoyo a un posible Gobierno de izquierdas con PSOE y Podemos. Este acuerdo podría servir de detonante para apostar por una situación de “diálogo” en Cataluña y poner fin a la inestabilidad que allí se encuentra.
De hecho, critica a la derecha por intentar asustar a la gente con un posible Gobierno con ERC y Podemos, dado que según su visión: “dicen que es terrible porque ellos no están en el poder y la izquierda sí”.
Tras la exhumación de Franco, el expresidente del Gobierno asegura que hay que estar cerca de las familias que no pudieron rendir homenaje a los suyos y razona que “es una obligación de la democracia recuperar a los olvidados, hacer Justicia a quienes se les privó de la vida y de la libertad”.
Las posibilidades de que un Gobierno socialista hubiese podido sacar a Franco del Valle de los Caídos han sido múltiples en la historia de la política española, pero Zapatero razona que “a pesar de que fue un error no sacarle antes, había miedo. Todos tienen miedo alguna vez”.
Desde la creación de la Ley de Memoria, liderada por Jose Luis Rodríguez Zapatero, todos los colectivos que sufrieron en el franquismo, los que lucharon en la Guerra Civil, en la dictadura y en el exilio, desde aquella fecha “están reconocidos en una ley solemne”.
La Ley de Memoria ha servido, entre otras cosas, para la exhumación de Franco, algo de lo que se enorgullece Zapatero: “La gran noticia de la exhumación del dictador, ayudará a los futuros hitos, haciendo que nuestra democracia sea más perfecta”, asegura.
Ahora bien, después de sacar al dictador del valle, el significado de la basílica sigue siendo franquista, pero es algo que para Zapatero “no formaba parte de su país”. De hecho, asegura en la entrevista, que “nunca ha estado en el Valle de los Caídos”.
Respecto al auge de Vox, Zapatero cree que es “una mala noticia”, pero ve algo positivo en todo esto y es que “en los resultados electorales ha habido una mayoría de izquierdas clara en España”.
El expresidente del Gobierno cree que la aparición de un partido de extrema derecha comienza desde la derrota del Partido Popular en las elecciones de 2004: “Los mismos que cuestionaban el atentado del 11-M de 2004, son los que luego comenzaron a decir que Rajoy era de centro izquierda o de izquierdas y lo llamaban la derechita”, señala.
Zapatero acusa al Partido Popular de no aprovechar para centrarse, dado que el “discurso debería ser contra la extrema derecha”. El problema para el expresidente es que “la derecha todavía no es avanzada y liberal, solamente es liberal cuando no hace nada”.
Entre otros temas, el expresidente socialista criticó duramente la falta de control contra Billy el Niño, el policía franquista que fue juzgado por torturar a trece personas. “Ha pasado desapercibido. Me cuesta hablar porque he sido presidente y puedo decir que no estuvo nunca encima de mi mesa”, razona José Luis Rodríguez Zapatero.