El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dio el pistoletazo de salida a la pre-campaña electoral fijando fecha para los comicios. El 28 de abril son las generales, pero apenas un mes después, el 26 de mayo, las autonómicas, municipales y europeas. Los partidos ya han diseñado sus estrategias de campaña y una de las aristas, dada la fragmentación del panorama político, son los pactos post-electorales.

En este sentido, Toni Cantó, candidato de Ciudadanos a la Comunidad Valenciana, ya ha mostrado sus preferencias.

Durante su entrevista en Es la tarde de Diete, el aún diputado (se despidió ayer del Congreso) ha asegurado que hará efectiva la decisión votada por unanimidad en el Comité Ejecutivo para establecer un cordón sanitario en torno a Sánchez y al PSOE.

Cantó ha argumentado que “con el PSC valenciano [refiriéndose al PSOE de Valencia] que se lanza en manos de Compromís yo no voy a pactar” porque “estamos en las antípodas”.

De hecho, el candidato naranja aboga por exportar el modelo andaluz. En otras palabras, veta al PSOE y opta por pactar con el Partido Popular y la ultraderecha de Vox: "Un pacto con el PP, gracias al que podríamos derribar al PSOE, como hicimos ya en Andalucía".