El sindicato de técnicos de Hacienda (Gestha) ha pedido este jueves a la Agencia Tributaria que investigue el "posible delito de fraude fiscal" del Rey Juan Carlos I, "si se acredita la veracidad" de las conversaciones en las que 
supuestamente Corinna dice que el monarca emérito la usó como testaferro para ocultar patrimonio en el extranjero. Con las pesquisas tributarias, según subraya esta organización, se demostraría que no existen "escudos fiscales" alrededor de la Familia Real.

En un comunicado, los técnicos de Hacienda manifiestan que hay indicios suficientes para iniciar una investigación fiscal, "pues las acusaciones vertidas en las cintas publicadas tienen la entidad suficiente como para que la AEAT les preste la máxima atención y las verifique".


La fórmula de los Pujol que podría usar el Rey

El secretario general de Gestha, José María Mollinedo, en declaraciones a El Plural, se ha mostrado convendido de que "habrá una investigación" al monarca emérito, si se prueba que las conversaciones conocidas son ciertas, ya que éstas apuntan a una conducta dolosa de delito fiscal en 2014, a estructuras opacas y personas interpuestas. Si no se investigase estariamos ante un escudo fiscal".

Juan Carlos I podría evitar la investigación y que se le juzgue por un posible delito, si opta por "presentar una declaración complementaria, la opción que usó la familia Pujol para evitar sanciones graves, cuando las autoridades de Andorra decidieron entregar a la Audiencia Nacional la información relativa a sus cuentas en aquel país. Cabe esperar que los asesores del Rey le aconsejen el mismo comportamiento", explica el técnico de Hacienda.

"Esto no impedirá que Hacienda verifique que los datos de la declaración complementaria sean verídicos", por lo que siempre se producirá una investigación, según apunta Mollinedo.

A juicio del representante de Gestha, también deberían investigarse la cuenta que el Rey emérito heredó en Suiza de su padre, don Juan de Borbón y Battenberg; el préstamo de Juan Carlos I a su hija Cristina para justificar la financiación del chalet de Pedralbes; así como los posibles delitos contra la Hacienda Pública que afectan a miembros de su familia, como el presunto blanqueo de capitales a través de la trama china de Gao Ping de cuentas bancarias en el país helvético. "Es una petición que hacemos en aras de la transparencia", remarca Mollinedo.
 

El Rey tendría que tributar al 51,5%

En su comunicado, Gestha explica que "las revelaciones señalan que supuestamente el monarca emérito, a través de su abogado en Suiza, Dante Canonica, creaba estructuras opacas, concedía préstamos y propiedades a Corinna que luego le reclamaba y ponía cuentas de bancos suizos a nombre de su primo Álvaro de Orleans y Borbón, residente en el paraíso fiscal de Mónaco, e incluso se le acusa de recibir comisiones del AVE a La Meca". Los técnicos recuerdan que "Juan Carlos de Borbón estaba obligado a declarar todos sus bienes en el extranjero en el modelo 720 desde el año 2013".

"Si se acredita que el monarca emérito es el verdadero titular del terreno de Marrakech y de las cuentas en Suiza y no las ha declarado en el modelo 720, el valor de dichos bienes es imprescriptible y tributará en el IRPF de 2014, último año no prescrito a esta fecha, como una ganancia patrimonial no justificada al tipo marginal del 51,5% al tener su residencia en Madrid", señala Gestha.

Según los técnicos, "el monarca emérito podría haber incurrido en infracciones tributarias muy graves, e, incluso, si el valor de los bienes en el extranjero no declarados supera los 233.010 euros, podría estar incurso en un posible delito de fraude fiscal en el IRPF de 2014, si la declaración del modelo 720 no fue correcta y completa, y un posible delito de blanqueo si se acredita que desde su supuesta cuenta en Suiza paga a terceros que previamente han pagado parte de sus gastos personales e inversiones".