Una demoledora requisitoria del titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Málaga ha abierto la mayor crisis política en la historia del más importante ayuntamiento que gestiona el PP en España, el de Málaga, donde el PP gobierna en minoría merced al respaldo de Ciudadanos.
“Injerencias políticas” en expedientes de Urbanismo
Este juez ha comunicado la apertura de diligencias previas en el denominado caso de presuntas y graves irregularidades urbanísticas 'Villas del Arenal' y la comparecencia de dos concejales del equipo de Gobierno del PP como investigados (antigua figura de imputado) así como al responsable de la gerencia municipal de Urbanismo. Este asunto que tiene la vida política de Málaga en tensión y en vilo dese hace meses proviene de las denuncias presentadas en Fiscalía por parte de Ciudadanos, PSOE e IU por “injerencias políticas” en el desarrollo, modificación y archivo de centenares de expedientes en la Gerencia de Urbanismo. Antes, una comisión de investigación municipal concluyó con unos datos y declaraciones que fueron los que motivó que Fiscalía solicitase que se llame ahora a declarar a los concejales del PP Teresa Porras, Francisco Pomares y al gerente de Urbanismo.
Delitos muy graves
El asunto pinta mal para el PP malagueño pues la decisión judicial es consecuencia de la denuncia del fiscal en relación a presuntos hechos delictivos de tipificación muy grave tales como prevaricación por omisión, tráfico de influencias, falsedad en documento oficial y malversación de caudales públicos contra estos dos ediles del equipo de gobierno y el cargo de confianza en Urbanismo.
Foto de campaña: Dos concejales en el banquillo ante el juez
Una decisión, la de las imputaciones, con muchas ramificaciones y consecuencias pues además de afectarle a dos ediles del núcleo duro del alcalde y candidato a la reelección, Francisco de la Torre, mostrará la foto de los ediles ante el banquillo como investigados tres días antes de la celebración de elecciones generales y a un mes de los comicios locales. Imágenes y simbología que la oposición usará como arma de destrucción contra el PP en las distintas campañas electorales que se avecinan.
Y es que además este escenario tiene repercusiones no solo en el pacto provincial firmado en Málaga por PP y Ciudadanos sino también en el regional que hizo que Moreno Bonilla accediese a la presidencia de la Junta y en la conformación del gobierno de coalición entre populares y naranjas.
Ultimátum de 48 horas de Cs al alcalde del PP
Ciudadanos dio ayer al alcalde popular Francisco de la Torre un ultimátum en toda regla sino cesa en 48 horas a los dos ediles y al gerente de Urbanismo. En un gesto sin precedentes en un socio que facilitó la investidura del alcalde y que le ha aportado estabilidad en el mandato al estar en minoría, el portavoz de Ciudadanos, Juan Cassá, le da de plazo al regidor hasta el lunes por la mañana. Si no los cesa dará por roto el pacto y pasará a la oposición convirtiendo en un infierno lo que queda de mandato para el equipo de Gobierno del PP. El resto de la oposición ya hacía tiempo que venía pidiendo el cese de los dos ediles y también se han lanzado al cuello del regidor popular.
Ciudadanos en Málaga firmó un pacto con el PP provincial que lleva la firma del actual consejero de la Presidencia y presidente del PP andaluz, Elías Bendodo, por el cual si un edil acusado de corrupción pasaba a ser declarado investigado o imputado debería de dejar la actividad política, el acta de concejal y el cargo automáticamente.
El alcalde hace caso omiso al pacto regional PP-Cs
Pero es que el caso puede ir más lejos si como todo indica, el alcalde se resiste a cesarlos ya que en el pacto rubricado entre PP y Cs a nivel regional para la formación del nuevo gobierno de la Junta de Andalucía se recoge la obligación de ambos partidos de apartar de cualquier institución a quien haya sido “imputado formalmente por delitos de corrupción”.
El problema alcanza así no solo una dimensión local con la consiguiente crisis en el Ayuntamiento y la pérdida de votaciones, iniciativas de la oposición que prosperarán y posible bloqueo de medidas preelectorales, sino que abrir una crisis de alto nivel entre los socios de gobierno de la Junta de Andalucía.
Respaldo del alcalde a los concejales imputados
Para más agravamiento de la crisis, el alcalde ya ha adelantado tras conocerse la decisión judicial que no está dispuesto a cesar a los ediles -del ámbito de más confianza del grupo municipal- y en un alarde de arrogancia o de suicidio político ha adelantado que su deseo es que ambos le acompañen en la lista que presentará a los comicios locales del 26 de mayo. Toda una afrenta a su partido y al Gobierno bicéfalo de la Junta de Andalucía.
El alcalde se enroca y le echa un pulso al PP andaluz
De la Torre en un órdago claro tanto al PP como a Ciudadanos y al propio Gobierno andaluz, les lanza un órdago de dimensiones profundas y ha descartado este sábado destituir a Porras y Pomares lo que le lleva indefectiblemente a la ruptura con su socio naranja. Además, ha advertido a Ciudadanos de que tiene la “impresión de que se están pasando "y de que están inmersos en "una acción vengativa”. Y el pulso no acaba ahí, sino que va más lejos y asegura que los dos concejales ahora imputados, Francisco Pomares y Teresa Porras, irán en lista para las próximas elecciones municipales "igual que otros compañeros del equipo de gobierno de crear una dinámica, provocar una investigación, y una serie de informaciones que no responden a la verdad para crear un contexto de denuncias posibles".
Casadistas frente a sorayistas
Todo es posible de dibujar en la mente de un “verso suelto” del PP como es Francisco de la Torre. Un “casadista” aislado en un jardín pepero, como el andaluz, plagado de sorayistas que se han hecho fuertes en el gobierno andaluz y que ahora contemplan con preocupación las consecuencias de las posturas “kamikazes” de un alcalde díscolo. Un alcalde que en unas recientes declaraciones se declaró “centrista” con “sentimiento de centro izquierda” pero dispuesto a pactar con Vox ¡Ahí es nada!