Ayer tuvo lugar una ceremonia oficial en Berlín presenciada por Angela Merkel y el presidente ucraniano Volodymyr Selensky. Durante el desfile militar, la canciller alemana sufrió temblores durante varios minutos.

Mientras sonaban los himnos de Alemania y Ucrania, Merkel ha intentado disimular los temblores sin éxito, poniendo los brazos hacia delante y levemente tendidos.

Una hora después, cuando ha comparecido ante los medios, la canciller ha asegurado que solo era un problema de deshidratación y que ya estaba recuperada: “Bebí por lo menos tres vasos de agua, algo que manifiestamente me faltaba, y ahora me siento muy bien”.  

Merkel, que el próximo mes cumplirá 65 años, anunció el pasado mes de octubre que se retirará de la vida política al final de su mandato, en 2021. Después de una reunión con su partido, Unión Cristianodemócrata (CDU) se eligió a Annegret Kramp-Karrenbauer para relevar a la actual canciller alemana, que lleva casi dos décadas al frente del partido.