Varios hombres trasladan el ataúd de la exprimera ministra británica Margaret Thatcher / EFE



La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, no ha desaprovechado su asistencia al funeral de su admirada Margaret Thatcher en Londres para ejercer de improvisada cronista en una entrevista para la cadena SER, donde a pesar del luctuoso acontecimiento, no ha podido evitar muestras de entusiasmo por estar allí y todo le parecia "maravillosamente" y "admirable". Su conocida anglofilia ha podido más que la solemnidad del acto por el fallecimiento del referente de la derecha ultraliberal. Pero en la sociedad británica no se han mostrado tan entusiastas: los 12 millones de euros que se asegura que ha costado el funeral han levantado ampollas en un país golpeado por los recortes y más cuando se trataba de despedir a una figura que hizo de la lucha contra lo público el centro de su vida política.

Las homilías católicas lucen menos
Aguirre ha comenzado su crónica mostrándose "agradecida de poder transmitir a los madrileños y a los españoles lo que ha sido un acto maravillosamente organizado" así como que "estaban todas las tendencias políticas". Ha puesto igualmente por las nubes el "admirable" discurso del arzobispo durante el funeral, e incluso ha aprovechado para mandar un recado a los curas españoles reclamando que la Iglesia católica "cultivara un poquito más" las homilías.

Insiste en que seguirá en política
Por el lado político, Aguirre apenas ha señalado sobre la figura de Thatcher era "europeísta" pero no partidaria de suprimir los estados nación, añadiendo que "yo tampoco". En clave personal también ha dejado claro que "la política no la dejaré mientras viva, porque es mi vida" aunque insistiendo en que la primera línea corresponde ahora a otros.