Génova arropa a Pérez Llorca y compra todas sus concesiones a la ultraderecha

La vida sigue en la Comunidad Valenciana y, como diría la canción, parece que continúa igual. El nombramiento de Juanfran Pérez Llorca como nuevo presidente de la Generalitat augura un cierto grado de continuismo en el ejecutivo autonómico, pero escorado aún más a la derecha. Su discurso de investidura estuvo plagado de concesiones a Vox para atraer sus síes. Lo hizo con un argumentario que no es sino un acatamiento de las imposiciones de los ultras para endurecer políticas de inmigración y su rechazo al Pacto Verde europeo. Consignas que han recabado la bendición de Génova, desde donde asumen por completo la alocución de su barón que, a la postre, comparten con los de Santiago Abascal. 

La portavoz del Partido Popular en el Congreso, Ester Muñoz, asegura que la cúpula nacional del PP apoya los compromisos en materia de inmigración y medioambiente asumidos por el recién nombrado presidente de la Comunidad Valenciana. Así lo ha dicho este sábado durante una entrevista concedida al programa Parlamento de Radio Nacional, al ser preguntada sobre las políticas migratorias y de transición ecológica incluidas por Pérez Llorca en su discurso de investidura para poder recibir el aval de Vox.

"Nosotros sí estamos de acuerdo con lo que dijo", ha indicado Muñoz, destacando que, en relación con la inmigración, lo que plantea el barón valenciano es que "convendría saber cuáles son las nacionalidades de la gente que delinque en su territorio". Una iniciativa que comunidades como el País Vasco y Cataluña también llevarán a cabo, registrando el origen de las personas detenidas por la Ertzaintza o los Mossos d’Esquadra, a los que la diputada popular ha hecho referencia.

Las justificaciones de Génova

Según Muñoz, las estadísticas recogen datos que diferencian los delitos en función del sexo o la edad del delincuente, así como la zona geográfica en la que se producen. De igual modo, la portavoz del PP en el Congreso no ve inconvenientes en registrar las “nacionalidades” de todas aquellas personas que incumplan la Ley, argumentando que “tener información no es negativo” y sosteniendo que esos datos pueden resultar útiles para la “seguridad” y hacer frente a la delincuencia.

En cuanto a las políticas verdes, la dirigente popular ha indicado que las posturas expuestas por Pérez Llorca durante su discurso de investidura no distan de lo que la Dirección Nacional defendió en su último congreso, en la misma línea que el Partido Popular Europeo propuso antes de las elecciones comunitarias.

El nuevo president cargó contra el Pacto Verde Europeo en su discurso, considerándolo como “la mayor amenaza” a la que se enfrenta el campo valenciano y, del mismo modo, defendió la continuidad de la energía nuclear como parte de sus políticas energéticas. Unas disposiciones que, según Muñoz, pretenden garantizar la sostenibilidad de “nuestra forma de vida en el campo y en el medio rural” sin perjudicar a quienes se puedan “ganar la vida siendo ganadero, pescador y trabajando en el campo”.  

Un día antes del discurso de investidura de Juanfran Pérez Llorca, el diputado y uno de los hombres próximos a Santiago Abascal, José María Figadero, fue rotundo en sus declaraciones: “Fin de las políticas climáticas europeas, apoyo a los agricultores valencianos, política antimigratoria y nucleares”. Un discurso que Pérez Llorca desplegó en su intervención con tono negacionista de la política medioambiental. “El pacto verde europeo impulsado por las élites europeas es la mayor amenaza para nuestros agricultores. Eso no es ecologismo, eso no es justicia climática, eso es incompetencia y desequilibrio”, apuntaba el flamante presidente de la Generalitat.