El cine es Arte, y como tal, es también una forma de comunicación, sobre todo para las nuevas generaciones, nacidas ya entre pantallas. Las temáticas, los argumentos y las imágenes de una película pueden hacer del Séptimo Arte, en sí mismo, un hecho pedagógico, aunque también, mal entendido, moralista. Así lo defiende la Academia de Cine en España, que, para crear futuros espectadores en la butaca, se encuentra elaborando un plan de medidas, que el Ministerio de Cultura ha prometido que incluirá en su Plan 2020, para que el cine entre en las aulas, que sea parte de los materiales educativos y una asignatura en sí misma.

Aprender a leer imágenes

El pasado mes de mayo se celebró en la madrileña sede de la Academia la jornada #CineyEducación, para recoger el sentir de los sectores implicados en lo que se denominó la “alfabetización mediática”. Mariano Barroso, vicepresidente primero de la Academia, defendió en ella que los niños “deben aprender a leer, pero también a ver”. “Sin emoción no hay aprendizaje. Los profesores tenemos que emocionarnos para emocionar a nuestros alumnos”, Mercedes Ruiz, maestra, psicopedagoga y coordinadora de la red social ‘Cero en Conducta’. El cine ayuda, y mucho, a generar esas sensaciones, y muchas películas son capaces de explicar conceptos impartidos en las aulas como el mejor de los manuales. Así, la iniciativa curricular deberá pasar, se especificó en la cita, por que las autoridades faciliten el trabajo a los profesores para que éstos no incumplan la legislación de derechos de autor, tener una asignatura audiovisual consensuada con los profesionales del cine y la televisión, y convertir las salas de cine en un destino de más en las habituales salidas escolares, como los museos.

El modelo francés como referencia

En las mesas redondas que compusieron estas charlas se miró también al exterior, analizando casos de éxito en la implantación de planes de este tipo en otros países. En particular se hicieron referencias al modelo francés, que, aplicado a raíz de una espectacular caída en el número de espectadores que se produjo en los años 80, ha contribuido a aumentar la asistencia al cine en un 30% en los últimos veinte años en el país vecino, entre todos los estratos sociales. Peter Andermatt, Managing Director Media España, destacó también la  barrera que ha roto EGEDA con las licencias educativas a las que se puePixabayden adherir los productores españoles para que sus películas se disfruten en las aulas sin que los centros educativos inclumplan la legislación de derechos de autor, y reivindicó el programa europeo CINED, una colección de grandes películas europeas seleccionadas para fines educativos. Los vídeos de la jornada están disponibles en el canal de Youtube de la Academia.