Las memorias de Juan Carlos I podrían ver la luz a finales de año. Si todo saliese según lo planeado por el monarca, éste encontraría publicado el libro hacia noviembre, sin embargo, en Zarzuela no verían con buenos ojos la decisión del padre de Felipe VI, según apunta El Confidencial, por dos motivos.

El primero de ellos es que el texto documental podría incluir cuestiones que resultaran incómodas tanto para el actual Jefe de Estado como para el conjunto de la familia. Además, la publicación coincidiría con la muerte de Francisco Franco, una cuestión que lejos de ser baladí, resulta importante sobre todo para los críticos con la monarquía y, más concretamente, con la figura del padre del rey actual.

Tampoco escapa al imaginario de Zarzuela que una imagen vale más que mil palabras y que nadie descarta, a día de hoy, que el manual termine por convertirse en un documento audiovisual en cualquier plataforma que lo compre. Y aquí vuelve a cobrar importancia, quien sabe si más si cabe, la posible amabilidad hacia el dictador, así como el tono en el que se presente la vida de Juan Carlos tanto en el país propio como en extranjeros.

Las memorias del rey emérito verán la luz en noviembre

Ya existe por el momento una obra que se acercaría a lo que en noviembre se convertirán en memorias, pero no es tal cosa. Se trata del libro Mi rey caído, publicado en nuestro país en 2022 y en el que su autora, Laurence Debray, expresa su gran admiración y empatía hacia Juan Carlos I. La escritora ha sido también elegida para redacta las páginas que verán la luz el próximo mes de noviembre.

La presentación del libro por parte de la editorial francesa Stock es toda una declaración de intenciones. Proyecta que éste “debe reparar una injusticia” en tanto en cuanto “si un monarca europeo coge su pluma tras 40 años de reinado, algo muy poco habitual, es porque el auxilio en Abu Dabi, los reportajes sensacionalistas en la prensa rosa y los errores de un rey que también es un hombre con debilidades y tentaciones han empañado lo que ha sido un éxito democrático ejemplar”.

Asimismo, sobre uno de los temas más controvertidos del libro, la figura de Franco, se señala lo siguiente: “He aquí un país que, tras una guerra civil atroz, estaba dirigido por un general austero y taciturno, Francisco Franco, partidario de una autocracia militarizada y católica (…) Un general que, en contra de la regla dinástica de sucesión, elige a un príncipe joven sin experiencia para que le suceda. En detrimento de su padre, que permanece en el exilio”.

La propia Debray ha sido la elegida para transcribir cientos de horas de conversación con el padre de Juan Carlos I que quedan recogidas en el volumen Reconciliación, nombre que reciben precisamente las memorias del anterior Jefe de Estado, que se publicarán en simultáneamente en España y Francia, previsiblemente el 12 de noviembre.

Es cierto que otros autores antes que ella iba a acometer esta iniciativa, o al menos de forma parecida. Uno de ellos fue el periodista de la Cadena Cope Carlos Herrera, conocido sobradamente amigo del rey y leal a la Corona. El informador trabajó durante un tiempo para Juan Carlos, pero la redacción de las memorias no llegó a cuajar, al parecer debido al monarca.  Misma intención habría tenido el periodista Francisco González Basterra, pero con mismo resultado.

Decisión delicada

El momento en que se publiquen las memorias supondrá una ruptura con lo que venía sucediendo en la Familia Real. Prueba de ello es que el padre del emérito, Don Juan, Conde de Barcelona, siempre se negó a que escribir sus memorias; siquiera versiones biográficas autorizadas. De hecho, éste no vio la publicación de lo más parecido a unas memorias, que llegaron un año después de su fallecimiento, en 1994.

Sea como fuere, la publicación entorno al emérito puede suponer una auténtica bomba de relojería, quién sabe si en el más estricto sentido político, pero sobre todo por los escándalos que le obligaron a irse a Abu Dabi, la desconfianza en algunas personas de allí cercanas a su entorno y la actuación misma del emérito, quien ha iniciado su guerra particular contra personas como Miguel Ángel Revilla, una acción que ha provocado enormes críticas.