La fecha marcada en el calendario socialista era la de este sábado 5 de julio, día en el que tendrá lugar la celebración del Comité Federal. De ahí se esperaba que emanasen los nuevos nombres propuestos para la sucesión de Santos Cerdán al frente de la secretaría de Organización y otras variaciones con las que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, quiere capear la crisis de confianza. Para conocer las medidas habrá que esperar unas horas, pero los perfiles ya han sido confirmados por Ferraz. Rebeca Torró Soler es la que se ha llevado el gato al agua.
Carrera política
Valenciana de nacimiento, Torró es licenciada en Derecho por la Universidad de Valencia. Su carrera política comenzó en 2007 como concejala de los socialistas valencianos (PSPV) en Ontiyent, ciudad de la que es nativa. Cuatro años más tarde, con la consecución de la alcaldía de Jorge Rodríguez, la nueva secretaria de Organización del PSOE accedería al Gobierno municipal, en el que se desempeñaría como portavoz hasta 2019.
Sin embargo, no sería hasta 2016 cuando daría su gran salto, de la mano del expresident Ximo Puig. Durante el primer Gobierno del Botànic sería nombrada directora general de Vivienda, Rehabilitación y Regeneración Urbana, cargo que abandonaría dos años después para ocupar el escaño de la Diputación Valenciana y la vicepresidencia segunda, que dejó desierto su antiguo compañero y alcalde de Ontiyent, quien posteriormente abandonó el partido. En 2019, Torró le plantó cara en las elecciones municipales, pero perdió a manos de Rodríguez.
Tras una derrota amarga, fue recuperada por Puig para la Secretaría Autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Consumo. En 2022 dio un paso más en su resurgimiento, pasando a ocupar el puesto que dejaba desierto Arcadi España, como consejera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad Sostenible. Además, ocupó la portavocía del Grupo Parlamentario Socialista en Les Corts durante la segunda mitad de 2023.
Tras las elecciones municipales de ese mismo, fue electa como diputada del Parlamento valenciano, aunque el PSPV cayó derrotado, quedando fuera del Gobierno y reduciendo el Botànic a un recuerdo. A finales de 2024, Torró desembarcaría en la política nacional al ser nombrada secretaria de Estado de Industria, a las órdenes del ministro Jordi Hereu. Ahora, Torró ha recibido la llamada de Sánchez y deberá asumir la mayor responsabilidad interna de su carrera política.
Otros cambios
El nombre de Torró no ha sido el único anunciado por la cúpula socialista. Si bien la secretaria de Industria será la cabeza de la cúspide, estará acompaña de otras tres personas en Organización. Para volver a evitar equivocaciones como las producidas con Santos Cerdán o José Luis Ábalos, desde Ferraz se deslizó que la intención de Sánchez era diluir el amplio poder de la gestión interna en diferentes manos, evitando que una sola persona campe a sus anchas, aúne mucho poder y pueda operar a espaldas de cualquier control.
Y así se ha hecho. A Torró le acompañaran otras tres personas que estarán adjuntas a Organización y, además, tendrán labores concretas. Anabel Mateos Sánchez, quien fuera diputada por Almería y se encarga actualmente de la Secretaría de Municipios del Litoral en la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, ocupará el cargo de adjunta a Organización y secretaria de Coordinación Territorial.
A esta se suma también Francisco Salazar Rodríguez, afiliado al PSOE desde 1992, secretario de Acción Electoral desde 2017 y diputado nacional por Sevilla en las dos últimas legislaturas. Anteriormente ya ocupó cargos de relevancia interna y ahora será adjunto a Organización y secretario de Análisis y Acción Electoral. El último adjunto y secretario de Transparencia y Acción Democrática será Borja Cabezón, que ya se encontraba en la gestora que fue designada para llevar Organización hasta la nueva constitución.