La tormenta judicial que rodea Koldo García, exasesor del que fuera ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha vuelto a agitar el tablero político. Esta vez, no solo por la abrupta ruptura con su abogado, Ismael Oliver, sino también por la creciente implicación de dos nombres del Partido Popular en sus maniobras a espaldas de la justicia: Miguel Tellado y Jacobo Pombo. Si del primero ya se había hablado, ahora es Pombo quien emerge como una figura central en la red de pactos, grabaciones y contactos paralelos que han terminado por dinamitar la defensa de García.
Jacobo Pombo, militante del PP en Cantabria, se ha visto mencionado en el marco de las conversaciones grabadas por Koldo. Relacionado previamente con una de las empresas investigadas en el caso Delorme, su aparición en este nuevo episodio no es menor. Según fuentes jurídicas, fue uno de los interlocutores clave con los que García intentó establecer un canal alternativo de negociación, en lo que él mismo describió como contactos con “los azules”, en referencia directa a los populares.
Las grabaciones a las que ahora se hace referencia estarían almacenadas en un disco duro que Koldo habría depositado en una notaría madrileña, acompañado por su hermano Joseba y su exmujer, Patricia Uriza, como testigos. En ese dispositivo figurarían conversaciones comprometedoras con Tellado, Pombo y otros representantes del Partido Popular, según fuentes cercanas a la investigación citadas por Diario Red. Todo esto se habría llevado a cabo a espaldas del entonces abogado de Koldo, Ismael Oliver, y también sin conocimiento previo de Leticia de la Hoz, la letrada que asumió su defensa tras la ruptura.
El papel de Pombo en esta maniobra ha sido subrayado por distintas voces próximas al caso. Diario Red fue el primero en publicar que “el letrado Ismael Oliver, uno de los abogados de mayor prestigio de la Audiencia Nacional y en el Tribunal Supremo, decidió este jueves cancelar su relación con Koldo García tras tener conocimiento de las negociaciones y los pactos que este habría mantenido con miembros del Partido Popular a través del intermediario Jacobo Pombo”. La mención directa al político cántabro en este contexto ha reavivado las sospechas sobre su rol más allá de un simple militante.
No se trataría solo de un contacto ocasional. De acuerdo con las mismas fuentes, Pombo habría actuado como facilitador de reuniones, favoreciendo una aproximación entre el entorno de Koldo y la cúpula popular. Una figura que, lejos de la discreción habitual en estos casos, ha comenzado a ganar protagonismo por su supuesta implicación en las gestiones más sensibles del exasesor. En especial, por su relación con los audios ahora bajo custodia notarial, que podrían tener un impacto decisivo en el proceso judicial.
Mientras tanto, la sustitución de Oliver por la letrada Leticia de la Hoz al frente de la defensa de Koldo ha traído consigo un cambio de estrategia. Pese a haber sido designada para representar inicialmente a la exmujer y al hermano del investigado, ahora De la Hoz ha asumido el frente principal del caso. Sin embargo, ella misma ha intentado marcar distancia con los movimientos realizados sin su consentimiento. “No tengo claro si voy a pedir la suspensión de la declaración porque mis clientes no tienen copia de todo el material que proviene del registro de su casa. Sabemos que la UCO ha seleccionado solo 8 audios de una gran cantidad de archivos que tienen que poner a disposición de las defensas porque puede que los no seleccionados por la Guardia Civil exculpen a alguien y estarían privando del derecho de defensa a los acusados”, declaró al citado medio.
De hecho, el material fue entregado al notario con instrucciones precisas: “debía hacer llegar las grabaciones a la abogada Leticia de la Hoz”, aseguraron fuentes jurídicas. No obstante, la letrada, consciente de la sensibilidad del contenido, habría pedido expresamente no recibir ese tipo de documentación comprometedora. Una reacción que deja entrever la gravedad del contenido y el impacto potencial que podrían tener las conversaciones almacenadas en el disco duro.
Por su parte, Pombo guarda silencio. No ha desmentido públicamente su participación en los encuentros con García, ni su presunto papel como intermediario. Su nombre ya figura en la investigación del caso Delorme, pero ahora se asocia a otro frente: el intento de Koldo de alinear su suerte judicial con la del Partido Popular. A falta de confirmación judicial, su imagen pública empieza a resentirse por su vinculación reiterada con episodios turbios que mezclan intereses personales, pactos oscuros y el uso instrumental de pruebas judiciales.
Una ayuda para “salir adelante” y cuatro meses de pagos a Pombo
En la transcripción de una de las conversaciones entre García Izaguirre y el ex secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán, publicada por Europa Press, el primero llega admitir en un momento que pidió ayuda a “varias personas” para poder “salir adelante”. La grabación data de diciembre de 2023, momento en el que el ex asesor de José Luis Ábalos ya tocaba a la puerta de Génova. O, mejor dicho, el PP llamaba a su timbre a través de Jacobo Pombo y de Miguel Tellado. Dos dirigentes unidos por una estrecha relación, según apuntan algunas publicaciones.
“Le pedí ayuda a Jacobo Pombo, le pedí ayuda a varias personas para pagar mi nómina”, llega a confesar Koldo García a Santos Cerdán en una de las conversaciones que figuran en el extenso informe de la UCO que se ha cobrado la vida política del ex secretario de Organización socialista. De hecho, en otra conversación, el exasesor de Ábalos repasa todas las gestiones que se le encomendaron cuando formaba parte del cuadro del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Momento en el que el ex número tres del PSOE le asegura que intentaría mover ficha para ayudarle.
Sobre esta ayuda que podría prestarle Cerdán, García Izaguirre sugirió que ya habría intentado obtener dinero a través del hijo de Ábalos para que, mediante dos empresas, le pudiera pagar “1.000 o 1.200 euros al mes”. “Y no me ha pagado”, concluyó. “Me dijeron que en México me podían dar, que un chico que se llama Jacobo, que es verdad que él me ha ingresado 1.025 euros durante cuatro meses. Eso es cierto”, admitió en la conversación el ex asesor del ex ministro de Transportes, en clara referencia al dirigente cántabro del PP Jacobo Pombo, que residía en el país centroamericano.
Así, mientras la figura de Miguel Tellado continúa en el centro del debate político, Jacobo Pombo empieza a ocupar un lugar propio en la trama. Un papel que, aunque discreto, parece haber sido más determinante de lo que se creía hasta ahora. La justicia tendrá que dilucidar si su intervención fue casual o estratégica, pero lo cierto es que su nombre ya está grabado, literalmente, en una de las tramas más mediáticas del panorama político.