Último día de campaña y las derechas afilan sus últimos dardos envenenados para arañar votos para sí. La lucha entre Partido Popular, Ciudadanos y Vox es encarnizada. Y con este escenario como telón de fondo, Pablo Casado ha sido entrevistado en Esradio por Federico Jiménez Losantos. Un espacio ideal, como buen reducto ultraderechista que es su programa, para lanzar sus mensajes y aglutinar el voto de la derecha en torno a su formación.

La ofensiva ha sido tan feroz que incluso ha provocado más de un momento de tensión entre Losantos y Casado, a pesar del idilio ideológico que mantienen.

Para empezar, el presentador le ha reprochado al candidato del PP a la presidencia del Gobierno que su cruce de floretes con Rivera: “¡Para qué se pelean!”. “Eso digo yo”, ha respondido Casado, quien ha explicado que “a las dos horas de ataques -refiriéndose a los debates electorales- tuve que decir ‘señor Rivera, no se equivoque de adversario’. No lo entiendo, es una estrategia errónea”. Eso sí, aprovechó este punto para lanzar una pulla al líder naranja: “A mi nadie me pregunta con quién voy a pactar. Él ya pactó con Sánchez en 2015, por eso todos los medios le preguntan al respecto”.

Con esta pregunta, Losantos le pedía explicaciones por fragmentar el espacio de la derecha, ante lo que Casado ha insistido en que “yo ya les planteé un pacto preelectoral. Por eso yo ahora tengo la legitimidad de decir que he intentado todo”.

A partir de aquí la entrevista se ha convertido en un monólogo de Casado pidiendo no el voto útil, sino la unión del voto en torno al PP mientras Losantos le reprochaba su actitud. “Solo puedo apelar al voto unido. En las provincias pequeñas es difícil que la tercera o cuarta fuerza saque escaño. Lo que estamos diciendo, sobre todo en el Congreso, es que tenemos que optimizar los escaños que hasta Tezanos reconoce que el PP es la alternativa a Sánchez”.

Casado ha puesto en valor que su partido es la visagra entre Santiago Abascal y Albert Rivera, porque “me entiendo con Vox y con Ciudadanos” mientras “ellos ni se hablan”. “Yo tengo claro que mi adversario es Sánchez. Yo ya he demostrado la generosidad con la derecha, tengo legitimidad para decir ‘vamos a unir el voto si no queremos que Sánchez, el caballo de Troya de Otegi, Torra y Rufián, siga en la Moncloa’”.

El presentador, no obstante, le ha reprochado que el PP fuera tibio con Cataluña, así como en otros asuntos, en los tiempos de Mariano Rajoy; ante lo que Casado se justificaba: “A la gente le puede gustar más o menos, pero nadie me puede negar que cuando hemos gobernado, con Aznar se crearon cinco millones de empleos y con Rajoy tres”. Y ha añadido que “yo lo he dicho: en el primer Consejo de Ministros, 155 activado”.

A fin y efecto de pedir al votante fugado a Vox por su descontento con el PP, Casado ha reflexionado que “si yo me tengo que hacer un trasplante, me voy al cirujano que ya ha hecho trasplantes”, haciendo referencia a que el PP tiene experiencia gobernando y los de Abascal “no han gobernado ni un pueblo”.

Ante este dardo envenenado, Losantos ha salido en defensa de Vox y ha instado a Casado a no insultar. “Federico, por supuesto que le respeto. A mí me llaman derechita cobarde y hemos enterrado 20 héroes de los nuestros. Yo no le llamo a él derechita cobarde. ¿Por qué a mí me pueden insultar y yo si hago una reflexión me dicen que tengo que respetar a mis adversarios”.

“Rajoy ha hecho un horror”, le ha reprochado Losantos, y el líder popular se ha defendido: “El votante de Vox lo que pedía al PP es lo que yo les estoy ofreciendo. En estos nueve meses cualquier exvotante del PP puede estar reconciliado con este partido. Si además tenemos balance de gestión, es positivo”.

Pero Federico Jiménez Losantos ha vuelto a salir en defensa de Abascal: “Por lo que nos ha contado, lo que ha hecho es adoptar el programa de Vox”. “Llevo yendo a Esradio desde 2005. Si hacéis programa de hemeroteca mío, veréis que digo lo mismo desde que llevaba pantalones cortos”, ha replicado Casado.

El momento álgido ha llegado cuando el periodista ha sugerido a Casado que tiene un jefe de campaña de dudosa profesionalidad. Tanto es así, que una vez ha concluido la entrevista, Losantos ha espetado: “Maroto yo siempre he pensado que es un espía sorayo que hará lo posible por estropearlo”.