Enrique Clavet Chambon, eurodiputado de UPyD.



La corriente interna de UPyD llamada La Ciudadanía Primero ha dado un paso al frente tras los malos resultados de la formación en Andalucía, donde no han conseguido ni el 2% de los votos y se han quedado fuera del Parlamento. Esta corriente, que integran entre otros el diputado de UPyD en el parlamento europeo, Enrique Clavet Chambon, Aurora Sotos e Ignacio Monao, han ofrecido una rueda de prensa en la que han exigido dimisiones y una toma de medidas para refundar el partido.

En conversación con ELPLURAL.COM, Enrique Calvet se ha mostrado muy duro con Rosa Díez y le ha reclamado "la dimisión de las personas ligadas a la Organización y a la Comunicación de la campaña electoral, entre ellos el diputado Carlos Martínez Gorriarán y Ramón Marcos".

Dimisión automática
Calvet entiende que a Rosa Díez, "después de estas elecciones, no habría que pedirle la dimisión, ésta debería ser automática, por haber mantenido a estas personas, y porque ella lo ha querido así, al ser tan personalista. Ha destrozado nuestro proyecto político, lo lleva a la desaparición. Rosa Díez no puede estar en la gestión. Es de vergüenza que no dimita".

Un partido "leninista"
El eurodiputado ha acusado a la líder de convertir "UPyD en un partido de expulsión de militantes, en un partido de corte leninista" del que "se han ido 16.000 personas". Y ha puesto el "ejemplo terrible" de Juan Rubio, concejal de Villanueva de la Cañada a quien "han vetado por expresar sus críticas a la mala dinámica del partido. Han prohibido las primarias porque iba a salir él y se ha atemorizado a sus compañeros".

Cómplices del "mamporrerismo"
Pese a que coincidan en su enfrentamiento ante la dirección, Calvet  critica a los “oportunistas” y “advenedizos”  que ahora han salido al paso, cuando todo lo que han hecho es “colaborar con la dirección en su mamporrerismo.  Invito a la gente a pensar en ello. Se colocan al lado del sol que más calienta”. Y ha incluido en este grupo a la diputada Irene Lozano, de quien ha recordado su “penosa carta” contra Sosa Wagner.

Adiós a las ocurrencias
Con vistas al futuro, la corriente de Calvet reclama "tener una ética en la democracia interna, ser integrador, escuchar a la disidencia, relanzar los mensajes radicales: unidad de los españoles, política económica igual para todos los españoles, recuperación de un pacto sobre educación, cambio del sistema corrupto". Y, sobre todo, "dejar las ocurrencias menores en las que está la dirección".

"Desprecio a los militantes"
Calvet considera que "ha habido un desprecio hacia militantes y dirigentes, se les ha maltratado" y cree que la solución para UPyD es "convocar, de manera urgente, una gestora con carácter aperturista, que reintegre a los muchos que han sido expulsados estos años, y convocar un congreso extraordinario para elegir a otro equipo al frente del partido antes de llegar a las generales, mientras se apoya a los candidatos locales para las municipales".