Última actualización hace 5 años
Finaliza el discurso de Felipe VI con un sonoro aplauso que ha durado varios minutos y que incluso ha ruborizado al monarca.
"Hace ahora algo más de 40 años las palabras concordia, reconciliación, entendimiento, respeto y por supuesto, libertad, resonaron como nunca antes en nuestro país y superaros las divisiones, los enfrentamientos y las imposiciones. Esas palabras fueron capaces de movilizar a todo un pueblo; movieron convicciones, sentimientos y emociones; recogieron e impulsaron sus aspiraciones e ilusiones largamente anheladas por muchos ciudadanos. Y gracias a esas palabras, a su vigencia y a su poder, Espera recuperó su autoestima y el orgullo colectivo como la gran nación que es”.
“España no puede ser de unos contra otros. Debe ser de todos y para todos”, espeta el rey.
"La nueva realidad, derivada de ese mayor pluralismo representativo, requiere el pleno desenvolvimiento de nuestro régimen parlamentario. Y la esencia del aprlamentarismo es el acuerdo; como también lo es el ejercicio del control político por la oposición. Pactar y controlar, acordar en unos asuntos y disentir en otros, son consustanciales a nuestro régimen parlamentario en el que la diversidad de idas y opiniones va unida al común respeto a nuestros valores constitucionales".
“Aprovecho esta oportunidad para agradecer sinceramente la labor de miles de ciudadanos que, a lo largo de estas últimas décadas, han participado en la vida política implicándose personalmente en la dirección y el gobierno de las instituciones, dedicando lo mejor de sí mismos a servir a sus compatriotas”, dice Felipe VI.
"Un rey comprometido con España, la democracia y la libertad"
Felipe VI agradece el “sentido afecto personal” de las palabras de Batet. “Hay días llenos de emoción que para uno conservamos en la memoria y nos gusta recordar. Y hoy será sin duda uno de ellos para mí”, dice el rey.
El rey manifiesta su “respeto institucional” hacia los diputado.
“Quiero también, al inicio de mis palabras, agradecer la colaboración de los representantes de los grupos políticos con representación parlamentaria que han participado en el procedimiento constitucional de consultas para formular la propuesta de candidato a la Presidencia del Gobierno”.
"Felicito a Don Pedro Sánchez y le deseo mucho éxito", dice el monarca, que extiende la felicitación a "todos los miembros del Gobierno".
La presidenta del Congreso, Batet, ha hecho una clara referencia al procés. Ha mentado la necesidad de respetar tanto las leyes como las sentencias, y ha ensalzado la figura del rey como mejor ejemplo de unidad, continuidad, diálogo y valores constitucionales.
“A pesar de nuestras discrepancias, necesitamos consensos políticos, sociales y territoriales. No es fácil”, matiza Batet. “Los consensos no se hallan, sino que se construyen. Esforcémonos en querer alcanzar acuerdos”.
La presidenta del Congreso asegura que “no hay democracia sin voluntad de entendimiento y convivencia. Una voluntad que hemos extendido a nuestra integración en el proyecto europeo”, continúa Batet, quien pide “hacer de estas Cámaras la voluntad de compartir desde la discrepancia”. “Escuchar exige respetar al otro. Escuchando más que hablando”.
Batet está citando frases de todos los presidentes del Congreso que le precedieron.
Batet dice que “no estamos ni para crear problemas que no existen ni para ocultar los que existen”, sino para dar respuestas. “Avanzar en los objetivos constitucionales de la igualdad y la erradicación de la pobreza; garantizar la igualdad de oportunidades o la atención sanitaria y social, el acceso a la vivienda y el enriquecimiento cultural”.
“Venimos aquí para configurar y desarrollar un proyecto común y compartido. Diversos pero en igualdad de derechos”.
“Cada legislatura tienen sus rasgos distintivos. Esta nace tras un año de haber experimentado” la falta de gobernabilidad, dice Meritxell Batet, quien da el pistoletazo de salida a la sesión de la apertura solemne de las Cortes.
La presidenta de la Cámara Baja ha ensalzado el diálogo entre formaciones y pide seguir ejerciéndolo, pues “la formación de Gobierno no es un fin en sí mismo, sino un instrumento”.
Los diputados de Unidas Podemos asi como los del PNV han evitado aplaudir al monarca. El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, sí que ha aplaudido en su condición de vicepresidente segundo de Derechos Sociales y Agenda 2030.
El rey Felipe VI ya saluda a los miembros de la mesa del Congreso de los Diputados así como a sus homólogos del Senado.
El rey Felipe VI ya baja la y se dispone a llegar a la entrada de los leones. Entretanto, miembros del Ejército permanecen cuadrados a su paso.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, saluda al rey Felipe VI, que ya se encuentra en los aledaños del Congreso.
Junto a él, la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía.
Se entona el himno nacional.
“Vamos a ver que esos partidos que desprecian al Jefe del Estado son los jefes de tres regiones en las que va a haber elecciones. Dejemos de lado los extremos y hagamos política desde el centro, incluyendo a los socialdemócratas, para alcanzar mayorías en las elecciones", ha explicado Inés Arrimadas en el patio del Congreso de los Diputados.
"Hoy los socios de Sánchez, que son los que quieren cambiar de país o de régimen, no quieren escuchar al rey de España. Yo apuesto por acuerdos constitucionalistas", sentencia la dirigente naranja.
"Hemos tenido que asisitir a la declaración de los capos de esta legislatura. Hemos presentado una propuesta de ilegalización de los partidos independentistas: unos están en el ataque al rey, al respeto democrático y otros en la destrucción de las principales instituciones del Estado", ha expresado el líder de Vox, Santiago Abascal, desde el patio del Congreso de los Diputados después de la declaración conjunta de rechazo a la monarquía realizada por los líderes de Junts, ERC, CUP, Bildu y BNG,
"Aprovechamos este inicio solemne de la legislatura, que no vamos a permitirles que pasen por encima de la ley y por encima de la mitad de España", ha sentenciado el líder ultra.
"El rey no es un interlocutor válido para nosotras y nosotros. Ni tiene la legitimidad de nuestros pueblos, ni le reconocemos ninguna función política. Menos aún cuando su papel con nuestras naciones no ha sido otro que el de intentar imponer proyectos y valores antidemocráticos, como quedó demostrado en el discurso autoritario pronunciado el 3 de octubre”, reza el manifiesto.
El manifiesto ha sido leído tanto en español por Gabriel Rufián como en catalán, gallego y en euskera.