El secretismo a modo de secta que caracteriza a la formación ultraderechista Vox así como los miedos de algunos militantes a criticarla, lograron ocultar hasta ahora una larvada crisis que afloró en Málaga a tan solo tres días de las elecciones.
Era el jueves previo al domingo electoral. Vox comenzaba su mitin central de campaña en esta provincia con tres secundarios de lujo ante la ausencia de su primer espada, Santiago Abascal que a la misma hora mitineaba en Valencia.

El número dos de Vox, Javier Ortega Smith, el ex funcionario de prisiones secuestrado por ETA José Antonio Ortega Lara y el número tres de la candidatura por Madrid, Iván Espinosa de los Monteros, se desgañitaban e invitaban a votar para “iniciar la Reconquista” a partir del 28 de abril ante unas 2.500 personas que no llenaron las 3.500 plazas del polideportivo de Ciudad Jardín.

Críticos en el mitin de Vox


Pero puso los nervios de los dirigentes nacionales de Vox a flor de piel. Y es que no pasó desapercibido para nadie que comenzado el acto y con un ambiente caldeado propio de este partido ultra de pronto, en una parte de la grada, casi una veintena de militantes de Vox Málaga se pusieron de pie portando individualmente carteles de gran formato que en su conjunto formaban la frase “Comisión Gestora Ya”. Rápidamente el servicio de orden del partido se echó encima de este grupo crítico, lo expulsó y puso de patitas en la calle a estos militantes disconformes con la dirección malagueña del partido.

División interna


La prensa provincial en la narración del acto hizo una ligera alusión al incidente pero además de ser grave que en un acto de Vox -con 2.500 personas enfervorizadas inmersas en un ambiente de pánico escénico de alta dimensión- una veintena de afiliados protesten y cuestionen a sus dirigentes hay un elemento más que justificaría esta acción. Se trata de la situación de extrema división en la que vive la formación de Santiago Abascal en la provincia de Málaga y que se evidenció en esa protesta pero que tiene además otras expresiones.

Deriva personalista y autoritaria


ELPLURAL.COM ha podido conocer de miembros cualificados de Vox en Málaga y provincia que el partido se halla divido en dos mitades y que el sector crítico al oficialismo malagueño está vivo y transmitiendo a Madrid lo que ellos consideran una situación aberrante y autoritaria de la actual Junta provincial. El problema latente es que de la actual Junta Directiva provincial compuesta por seis miembros y presidida por el candidato a la alcaldía de Málaga, José Enrique Lara, se halla gravemente fraccionada por la dimisión de tres de sus componentes, miembros del sector crítico y opuestos a las formas de actuar de su presidente. Según nuestras fuentes las dimisiones se produjeron por lo que entienden que es la “deriva personalista de su presidente y su núcleo cercano en toda la provincia”. Debería haberse elegido una nueva dirección provincial tras la dimisión del 50 % pero su presidente se opone. “José Enrique Lara ordena, manda, no consulta, oculta información y mantiene unas formas deplorables de actuación” nos dicen desde el sector contrario a Lara.

La crisis afecta a importantes municipios


El malestar se ha extendido a la provincia tras la conformación de las listas municipales “impuestas y desplazando a personas conocidas y que habían trabajado mucho para el partido. Han sido relegadas y sustituidas como en el caso de Marbella, Benalmádena Vélez, Mijas, Manilva y Torrox por personas que no conocíamos en Vox y que no tienen nada que aportar”. Nos informan que “por estas razones y otras, un número importante de miembros disconformes con Lara en toda la provincia y muy especial en la capital estemos exigiendo, y así lo hemos comunicado a la dirección nacional, que se elija un nuevo Comité Ejecutivo Provincial pues esta situación de órgano con la mitad de dimisionarios no es representativa”.


Exigen una Comisión Gestora


Durante la pasada campaña electoral han circulado en redes distintos memes contra el presidente Lara. En una información que ha sido masivamente difundida en redes se expresa: “Comisión Gestora para Málaga ¡¡¡Ya!!! Basta de despotismo, nepotismo, ostracismo e incompetencia,”. En un meme se puede ver al candidato a la alcaldía de Málaga y líder de Vox en la provincia ataviado como Hitler y en otro se ironiza con su CV.

El poder del Opus en Vox Málaga


Creen que la estrategia de Lara es ganar tiempo hasta que se celebren las elecciones locales pues en distintas localidades ha impuesto, en contra del criterio de los afiliados, a miembros de su “cuerda y de la Obra” y muy especialmente en la capital malagueña donde el poder y la influencia del Opus Dei en las listas y en el entorno del presidente y candidato Lara está muy presente. En el caso de Málaga, además del propio alcaldable Lara miembro destacado del Opus, este ha impuesto de segunda en la lista a otra seguidora de la doctrina de Escrivá de Balaguer, Sonia Crespo, a la que ha colocado por decisión propia saltándose a numerosos afiliados “con mucho más prestigio y tiempo trabajando por Vox”. Una decisión, la de Crespo, que ha creado un inmenso malestar en la capital y que atribuyen al “poderoso ascenso del Opus Dei en el partido en Málaga”.

Como afirmábamos no solo es en la capital donde cunde el descontento por la gestión del Comité y las formas autoritarias que se han aplicado para confeccionar las listas. Desde distintas localidades de la provincia también ha emergido un núcleo amplio de descontentos. Un miembro destacado de una importante localidad costasoleña nos dice “Vox Málaga se ha ido de las manos. Enrique Lara y Antonio Gallego han hecho un boicot en las listas y nombrado gente de paja en cada ayuntamiento para poder manipularlos a su antojo”.

El caso de Marbella


Sobre el caso concreto de la lista municipal que Vox presenta en Marbella se mantienen fuertes, tremendas, acusaciones contra algunos de sus componentes. Critican que han dejado fuera de la candidatura “a todo el equipo que venía trabajando desde octubre. Y lo han hecho sin avisar, a solo tres horas del cierre de las listas- La noticia ya la ha sacado el ABC… un desastre y en el peor momento”.

La crisis se agravará tras el “fracaso” en las elecciones


Este era el estado de división interna de Vox en la provincia hasta el día de celebración de las elecciones generales. Ahora, y tras conocerse los resultados, la situación es susceptible de empeorar debido a los resultados “malos” obtenidos. Vox salía en todas las encuestas como una plaza de fuerte atracción electoral para la formación de ultraderecha con muchas posibilidades de obtener dos diputados al Congreso. Una vez abiertas las urnas el descontento entre los afiliados ha sido general pues solo han obtenido uno.

El malestar en el sector crítico es enorme porque en su día se opusieron al dedazo de José Enrique Lara que de nuevo impuso su candidata número uno. Se trata de la ya diputada Patricia Rueda. Una “candidata flojita, que nadie conocía en el partido, que no era afiliada a Vox, de la que se desconocía que se simpatizase con nosotros y con escasa capacidad política”. Ha resultado un fiasco y nos ha llevado a no obtener un segundo diputado, nos comentan. Nosotros lo avisamos y la respuesta de Lara fue que en Madrid estaban de acuerdo. Falso de toda falsedad. Madrid no había intercedido por Patricia Rueda, fue otro invento del presidente Lara”.