Se complican las negociaciones entre el Gobierno y Unidos Podemos, su principal socio en el Congreso, para la convalidación del techo de gasto que se aprobará este viernes en el Consejo de Ministros.

Desde el Ministerio de Hacienda se han mostrado con la mano tendida para negociar con los de Pablo Iglesias y han estudiado las propuestas formuladas por Unidos Podemos para apoyar la senda de estabilidad presupuestaria 2019-2021, aunque mantiene que no subirá el IRPF ni elevará el déficit de 2019 ni tampoco derogará la Ley de Estabilidad.

Fuentes del departamento que dirige María Jesús Montero insisten en que la meta del Gobierno ahora mismo es intentar recabar el respaldo necesario para que los objetivos de déficit de las Administraciones Públicas renegociados con Bruselas sean aprobados en el Congreso, después de que los rechazara el pasado 27 de julio.

Es el paso previo a la búsqueda de apoyos a los Presupuestos Generales del Estado para 2019, en los que Hacienda trabaja teniendo en cuenta el objetivo de déficit vigente para la Administración Central (0,3% del PIB), consciente de que su propuesta de consolidación fiscal será tumbada en el Senado con la mayoría absoluta del PP, aunque consiga pasar el trámite en el Congreso.

Con este panorama, se ha producido este miércoles la primera reunión formal entre Hacienda y Unidos Podemos donde el Gobierno ha mostrado nuevamente que no piensa romper con Bruselas.

El punto para llegar a un acuerdo podría venir por la disposición a modificar la Ley de Estabilidad en lo relativo a la aprobación de la senda presupuestaria, que en la actualidad debe ser ratificada por ambas cámaras sin vuelta al Congreso, como ocurre con otras tramitaciones parlamentarias.

No obstante, el Gobierno no se ha manifestado abiertamente al respecto y Unidos Podemos tampoco ha dicho si esta modificación sería suficiente para su formación.

Entre los puntos de desacuerdo también están la supresión de las deducciones fiscales para los planes de pensiones privados y el incremento del tipo marginal del IRPF en los tramos más altos, dado que el Gobierno mantiene que no tocará el Impuesto sobre la Renta.

Tampoco se acabará con las sociedades de inversión de capital variable (sicav), en contra de lo publicado hoy por algunos medios de comunicación que lo daban como una concesión del Gobierno a Podemos, algo que el Ministerio de Hacienda ha desmentido.

Los puntos de acuerdo con Unidos Podemos podrían estar en la negociación de las medidas fiscales ya avanzadas por el Gobierno como los impuestos específicos a la banca y a las tecnológicas, el establecimiento de un tipo mínimo en el Impuesto de Sociedades o la flexibilización de la regla de gasto.

Pese a esto, esta misma mañana la portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarra, ha afirmado que encuentra “muy difícil llegar a un acuerdo” si “el Gobierno no se mueve de su posición”.