Este domingo, los bomberos del Ayuntamiento de Bilbao han emprendido viaje hacia la Comunidad Valenciana para colaborar en las labores de rescate y ayuda tras el paso de la devastadora DANA que ha golpeado la región, causando más de doscientas muertes y dejando numerosas personas desaparecidas.
Sin embargo, su partida ha estado rodeada de polémica: en los días previos, los bomberos denunciaron en redes sociales que, a pesar de haber sido activados en tres ocasiones para acudir a la emergencia, se les impidió desplazarse hacia Valencia, lo cual generó frustración y enojo en este cuerpo de emergencia.
“Trece bomberos del Ayuntamiento de Bilbao, activados para acudir a la emergencia de Valencia, queremos denunciar que es la tercera vez que se nos activa desde el miércoles y, por tercera vez, se nos impide acudir”, expresaban los bomberos en un vídeo. Contaban con tres vehículos preparados, un camión grúa con grupo electrógeno, hospital de campaña, bombas de achique, material de rescate y buzos especializados; sin embargo, lamentaban, "desconocemos los motivos políticos u organizativos por los que los valencianos no pueden contar con nuestra ayuda".
La “luz verde” llega tarde
Finalmente, este domingo, el gobierno vasco ha dado luz verde a que un dispositivo de 61 efectivos y vehículos especializados partan hacia Valencia. El despliegue incluye doce vehículos ligeros, seis pesados, tres embarcaciones y 116 bombas de achique, además de equipos de rescate en altura y acuático. Según el gobierno vasco, desde el primer momento se ofrecieron, tanto medios aéreos ,como terrestres, a las autoridades valencianas, pero no ha sido hasta este domingo cuando han recibido la solicitud concreta de ayuda.
En un comunicado, el consejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha enfatizado la importancia de una coordinación precisa en situaciones de emergencia para que la ayuda sea efectiva. “Si no se organiza de manera adecuada, la mejor voluntad que podamos tener para ayudar se puede convertir en un problema”, ha señalado Zupiria, quien también ha destacado que las instituciones vascas han estado en comunicación constante con la Generalitat Valenciana desde el inicio de la emergencia.
Críticas a la falta de coordinación en Valencia
Esta falta de coordinación ha generado malestar entre los bomberos de Bilbao, quienes han visto cómo sus recursos y experiencia fueron ignorados durante días mientras la emergencia escalaba en gravedad. En sus declaraciones, han manifestado su frustración ante la imposibilidad de brindar apoyo inmediato a los damnificados, aludiendo a razones políticas o de organización que, consideran, han perjudicado la respuesta ante la catástrofe.
La situación se agrava en el contexto de las críticas al Gobierno de Carlos Mazón, quien ya enfrenta cuestionamientos por desmantelar la Unidad Valenciana de Emergencias (UVE), una medida que muchos consideran clave en la falta de preparación ante el temporal. La Generalitat agradeció la oferta de ayuda de las instituciones vascas, pero insistió en la necesidad de recibir una petición específica para coordinar adecuadamente los recursos.