María Dolores de Cospedal continúa en la Junta Directiva Nacional del Partido Popular. Un espacio que según los estatutos de la formación “es el máximo órgano de dirección del partido entre Congresos” y se “reúne, ordinariamente, al menos una vez cada cuatro meses”.

Una dimisión a medias

Fue este lunes cuando Cospedal anunció a través de un comunicado -tras verse con Casado en la sede del PP- que dejaría de ser miembro del Comité Ejecutivo Nacional. Puesto que le ofreció Pablo Casado nada más ganar el congreso extraordinario del Partido Popular el pasado mes de julio.

Eso sí, Cospedal optó por conservar su acta de diputada en el Congreso.

Preguntado expresamente sobre si habían pedido a Cospedal que dejase también su acta en el Congreso, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, prefirió no responder y se limitó a decir que él no comentaba cuestiones de "índole personal".

Desde Génova sostenían que el escaño "depende de ella" y que el partido no podía quitárselo. Sin embargo, en el PP prefirieron ocultar -o al menos pasar por alto- que al seguir como diputada, Cospedal mantendría su asiento en la Junta Directiva Nacional del PP.

Una presencia en el “máximo órgano de dirección del Partido Popular entre Congresos” que nada tiene que ver con una cuestión de índole personal.

Los Genoveses,  colaboradores de ElPlural.com, ya habían advertido en redes sociales de que Cospedal podría seguir en la Junta Directiva del PP. Algo que han confirmado desde Génova a este periódico. En el PP alegan ahora que Cospedal no podría dimitir del cargo porque no lo prevén así los estatutos.