La escalada de tensión entre Estados Unidos y Corea del Norte haría pensar que los ciudadanos estadounidenses tendrían bien cogida la medida al país comunista. Por aquello de “conoce a tu enemigo” que decía Sun Tzu en El arte de la guerra. Pero, a finales de abril, The New York Times demostró que más del 60% de los estadounidenses no consiguieron situar en un mapa al país que gobierna Kim Jong-un.



Lo curioso del experimento, que se encargó a Morning Consult, es que la mayoría de los que sí acertaron a poner en el mapa a Corea del Norte son, a su vez, quienes creen que las mejores opciones para atajar el conflicto pasan por la diplomacia y no por la apuesta bélica o, simplemente, por no hacer nada. Quizás, por saber que Corea del Norte está más cerca de lo que creen quienes sitúan al país asiático en Afganistán, la India o incluso Australia.

Las diferencias para encontrar a Corea del Norte van por barrios. Los republicanos son más capaces de encontrar al país en un mapa mudo de Asia (el 37%), mientras que entre los demócratas sólo aciertan el 31%, aunque los independientes se llevan la palma y el 39% pasa el test. Los estudios también influyen: aquellos que no han ido a la Universidad fallan en el 69% de los casos; los que tienen un grado superior, fallan el 54% y los que tienen posgrado sólo yerran en el 47% de los casos.

Por edad, influye quizás estar estudiando, porque el 37% de quienes tienen entre 18 y 29 años aciertan, aunque los más fieles a la geografía son los mayores de 65 años, que aciertan al 48%, quizás por tener en el recuerdo la Guerra de Corea, de 1953, según el diario norteamericano.


Los problemas de los estadounidenses con los mapas no son algo nuevo. En el año 2006, no eran capaces de localizar al país con el que estaban en guerra y seis de cada 10 adultos jóvenes fallaban a la hora de señalar Irak en un mapa de Oriente Medio. El 75% tampoco era capaz de situar a Irán o a Israel y sólo la mitad conseguía identificar el estado de Nueva York en su propio país.