La Fiscalía Anticorrupción atribuye al exvicepresidente económico Rodrigo Rato once presuntos delitos contra Hacienda y de blanqueo de capitales, insolvencia punible, corrupción y falsedad documental, por lo que pide para él más de 60 años de cárcel.

En una nota fechada este martes, Anticorrupción solicita penas de prisión de entre cuatro y seis años por cada uno de los once delitos contra la Agencia Tributaria, seis años por el delito de blanqueo, cuatro por el delito de insolvencia punible, otros cuatro por el delito de corrupción en los negocios, y tres por el delito de falsedad documental. Además,  pide la indemnización a la Administración tributaria por las cantidades defraudadas en cada uno de los ejercicios fiscales indicados.

El pasado 1 de marzo, el titular del juzgado de Instrucción número 31 de Madrid decidió procesar al exvicepresidente del Gobierno y a otras 16 personas, físicas y jurídicas, por posibles delitos de corrupción en los negocios, blanqueo de capitales y presunta elusión fiscal.

En su auto, el juez Antonio Serrano-Arnal daba por concluida la instrucción del caso, que desde 2015 investiga el origen del patrimonio del exministro de Aznar.

Incrementos patrimoniales no justificados

En el comunicado conocido hoy, la Fiscalía asegura haber identificado incrementos patrimoniales no justificados entre 2005 y 2015 por un importe total de 15,6 millones de euros, además de rendimientos de capital mobiliario en el exterior tampoco declarados a Hacienda, así como 7,4 millones de euros defraudados a la Agencia Tributaria. A esta última cifra, señala Anticorrupción, habría que añadir la tributación de servicios profesionales a través de sus sociedades, con lo que las cuotas defraudadas ascenderían a 8,5 millones de euros.

Anticorrupción sostiene que Rato ha mantenido desde 1999 un patrimonio oculto a la Hacienda española a través de diversas sociedades, con las que habría realizado inversiones en "multitud de cuentas bancarias" abiertas en Bahamas, Suiza, Luxemburgo, Reino Unido, Suiza y Mónaco, entre otros.

Cuentas ocultas en el extranjero

La documentación obtenida en abril de 2015 tras al registro del domicilio de Rato y en otros lugares muestra que el exvicepresiente tenía cuentas en Estados Unidos y Suiza desconocidas para el Fisco español, y que ha operado a través de cuentas en territorios de baja tributación como la Isla de Man, Kuwait y Curaçao.

Según Anticorrupción, Rato "se ha servido, presuntamente, de estructuras financieras para realizar movimientos transfronterizos de dinero encubiertos a través de trust y sociedades opacas".

El exministro se acogió en noviembre de 2012 a una amnistía fiscal, pero omitió "cualquier referencia" a una serie de sociedades y declaró un patrimonio en el exterior de 115.333 euros, por el que abonó 11.533 euros a Hacienda.

Cobro de comisiones en su etapa en Bankia

Anticorrupción ve también "indicios racionales" de que Rato siendo presidente de Caja Madrid-Bankia, cargo que ocupó entre enero de 2010 y mayo de 2012, cobró indebidamente comisiones procedentes de los contratos de publicidad que la entidad bancaria firmó con Publicis y Zenith, relativos a la fusión y salida a bolsa de la entidad. Dichas comisiones, según la Fiscalía, se derivaron a diversas sociedades logrado "difuminar el origen del dinero".

La causa abierta en el juzgado madrileño incluye a Rato y otras doce personas, además de a ambas agencias de publicidad en calidad de personas jurídicas.