Este lunes se produjeron reuniones bilaterales muy simbólicas. Por un lado, Pedro Sánchez se reunió con el lehendakari Íñigo Urkullu; y por otro, el president de la Generalitat, Quim Torra, recibió a Pablo Iglesias. El presidente del Gobierno prometió al presidente del País Vasco que estudiaría una lista con 37 concensiones. Por su parte, el líder de Podemos se ofreció como mediador en el conflicto con Cataluña. Con este escenario como telón de fondo, el diario ABC anuncia en su portada de este martes un nuevo apocalipsis con Sánchez e Iglesias al frente del armagedon.
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“Desmantelando España”. Así reza la portada de ABC, ilustrada con fotografías de sendos encuentros. Pero más allá del titular y las imágenes, el diario dedica un editorial criticando la política del presidente.
Bajo el título “Sánchez asume la agenda nacionalista”, asegura que “los socialistas siempre han sido conscientes de que tendrían que pagar un peaje al nacionalismo”. “Con el nacionalismo catalán están claras las concesiones: retirada de recursos ante el Tribunal Constitucional, acercamiento de los cabecillas del golpe separatista en prisión provisional, cuestionamiento progresivo de la Constitución de 1987…”, reza el editorial.
Pero ABC se centra en el nacionalismo vasco, que “demostró ayer también su capacidad para obtener dividendos”. Destaca el preacuerdo de Sánchez y Urkullu con las concesiones, tales como la Seguridad Social y las prisiones. Eso sí, hacen especial hincapié en “la revisión del modelo territorial, que es el eufemismo del derecho a la autodeterminación”.
Según ABC, quien augura un Gobierno “como en los tiempos de José Luis Rodríguez Zapatero”, la clave “será el precio que [Sánchez] esté dispuesto a pagar”. Y sentencia: “Las decisiones que premian a los nacionalistas atacan la raíz del pacto constitucional de 1987, y la experiencia demuestra que son y serán irreversibles, salvo que el Estado aplique medidas excepcionales como las del artículo 155”.
Las redes sociales no han quedado al margen de este mensaje apocalíptico. Al periódico le han llovido críticas tan feroces como “desmantelando el periodismo”.