Supongo que a estas alturas ya lo sabréis: la culpa de la muerte de Rita Barberá la tuvieron, en palabras de la ínclita Celia Villalobos, “los tuiters”. Los “tuiters”, sí, que suena a algo así como a los Gremnlins. Pero no, los “tuiters” son solamente mensajes de 140 caracteres de ciudadanos anónimos que dan rienda suelta a su libertad de expresión y derecho al pataleo. A veces incluso con sentido del humor, mire usted. Algo peligrosísimo, cierto, sobre todo para una derecha que nunca se ha llevado demasiado bien con la libre circulación de ideas y pensamientos. Por supuesto, ante tamaña salida de tono, los tuiteros reaccionaron defendiendo su derecho a expresarse y en unos minutos “#LosTuitersMataron” se convertía en primer Trending Topic del día.
Se trata de una banda muy peligrosa. ¡Utilizan el cerebro! ¡Y tienen memes!
Y van armados:
Pero no están organizados:
Los tuiters tienen la culpa de todo:
Absolutamente de todo:
Desde hace siglos:
Ya son un clásico criminal:
Y eso que la “víctima” llevaba más de un año sin pisar por la red:
Además algunos tienen coartada:
También acabaron conmingo, no fue Nietzsche:
Parecían gente tan normal...
Pero son peligrosísimos:
En América tienen a Trump, pero siguen flipando con nosotros:
Tranquilos, todo este absurdo tiene una explicación científica: