Los anuncios de alimentos y bebidas con alto contenido en azúcar o sal, en general considerados poco saludables, tienen un impacto sustancial sobre los niños e influyen en su inclinación por las dietas dañinas, según una investigación de la Universidad de McMaster, de Hamilton, Ontario (Canadá), publicada en la revista científica Obesity Reviews.El estudio examinó 29 ensayos sobre la comercialización de alimentos y bebidas poco saludables a través de televisión y cine, videojuegos comerciales, el uso de logotipos de marcas, envases con personajes de dibujos animados y anuncios en folletos y/o revistas. También el consumo calórico y las preferencias dietéticas entre más de 6.000 niños.

80% de anuncios de comida no saludable

Y sus autores concluyeron que la publicidad aumentó la ingesta alimentaria e influyó en la preferencia dietética en los niños durante o poco después de la exposición a los anuncios. Y es que cuando los niños fueron expuestos a anuncios no saludables, consumieron significativamente menos calorías saludables, según el estudio. Y los resultados también plantean que los niños de 8 años o menos pueden ser especialmente susceptibles a los efectos de la publicidad de alimentos y bebidas.Para los investigadores, estos hallazgos son particularmente destacables teniendo en cuenta los últimos estudios que revelan que los niños están expuestos a un promedio de cinco anuncios de comida por hora, con los alimentos poco saludables representando más de un 80 por ciento de todos los anuncios de alimentos televisados en Canadá, Estados Unidos y Alemania.

Un problema con la obesidad

"Las tasas de sobrepeso y obesidad entre los niños están aumentando en todo el mundo", afirma Behnam Sadeghirad, estudiante de doctorado en Epidemiología Clínica y Bioestadística de McMaster y autor principal del estudio. "Ésta es la primera evidencia de revisión sistemática basada en 29 ensayos aleatorios y muestra que los niños con una amplia exposición a la publicidad de alimentos poco saludables y bebidas a través del embalaje del producto (superhéroes, logotipos), la televisión e Internet consumen más calorías a corto plazo y prefieren la comida basura", explica.