El pasado verano la bacteria Listeria monocytogenes, que causa la listeriosis, dejó en España el terrible saldo de tres muertes y siete abortos, a raíz de un brote de la enfermedad derivado de carne mechada comercializada, que provocó 330 casos. Ahora, un equipo de la empresa emergente Encapsulae y el Instituto de Cerámica y Vidrio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha creado un aditivo que reduce de forma "drástica" la población de bacterias.

En los ensayos, gracias a él se pasó, en 24 horas, de 100.000 unidades formadoras de colonia a cero. Según la información facilitada por el CSIC, la dosis con capacidad de infectar es aquella que es superior a 100.000 unidades por porción ingerida.

El profesor José Francisco Fernández Lozano, del Instituto de Cerámica y Vidrio del CSIC, ha explicado que el encapsulado del nuevo aditivo en el envase plástico genera una superficie de contacto que impide el crecimiento de las bacterias, y ha subrayado que el efecto se ha demostrado también en el caso de la Listeria monocytogenes.

La listeriosis tiene poca morbilidad (se dan pocos casos de infección) pero una muy alta mortalidad, de aproximadamente un 30 por ciento, que en el caso de grupos sensibles, como ancianos o fetos, se eleva aún más, hasta el 70 por ciento.

Durante el año 2017, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria registró 2.480 casos de listeriosis en la Unión Europea, con 227 muertes, y ese año en España los casos confirmados ascendieron a 284.