La inmensa mayoría. Entre un 70 y 90 por ciento de los residuos acuáticos que hay en las playas son plásticos. En total circulan por la costa de la Unión Europea unas 800.000 toneladas de bolsas de este material sólo en la Unión Europea. Son datos del PNUMA, programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, que, en retrospectiva, explica que mientras que en 1950 se arrojaron 1,5 millones de toneladas de plástico, en 2015 fueron 300 millones, un dato que también ha confirmado la Comisión Europea. Y como prospección, las Naciones Unidas prevén que en 2050 la producción de plástico a nivel mundial crezca hasta los 33.000 millones.

El coste de todo esto

¿Y cuál es el coste de todo esto? El programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente estima que la basura marina cuesta cerca de 8.000 millones de dólares al año en pérdidas para los sectores de la pesca, la acuicultura, el turismo marino y las tareas de limpieza. Además, representa una pérdida de 622 millones anuales en el sector del turismo y 81,7 millones de pérdidas anuales de la flota pesquera de la Unión Europea. ¿Y termina reciclándose algo de este plástico? La Comisión Europea indica que en 2014 se reciclaba menos de un tercio del plástico. De esta forma, a pesar de que más del 65% de los residuos de envases se reciclan, menos del 40% de los envases de plástico se reciclaron en 2014. La Comisión Europea estima que el 89% de las bolsas de plástico solo se usa una vez.

Por países...

Por países, los mayores consumidores de plásticos en Europa, fueron Alemania (25%), Italia (más de 14%), Francia (casi 10%), Gran Bretaña (casi 8%), España (más de 7%) y Polonia (6%). Las principales vías de reciclaje en Europa eran en 2014, con un 39% el uso energético y con un 30% el reciclaje del material, mientras que un 31% de los residuos de plásticos fueron a vertederos.