Antes de expandirse en metástasis, el melanoma, el origen del cáncer de piel en su rango más agresivo, se activa con proteínas que envían señales para alcanzar órganos lejanos. Un equipo del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) ha conseguido visualizarlo en un modelo de ratón, y después validar el hallazgo en pacientes de los hospitales 12 de Octubre de Madrid y Clínic de Barcelona. Han identificado una molécula, MIDKINE, que parece ser la encargada de iniciar esos movimientos en sus fases más iniciales. El experimento ha demostrado que los pacientes con altos niveles de MIDKINE en los ganglios linfáticos tienen un peor pronóstico, pero bloqueando esta molécula se puede inhibir las metástasis del melanoma.

Extrapolable a otros cánceres

El trabajo, publicado en la revista Nature, permite entender mejor cómo se propaga el melanoma y abrir nuevas vías de tratamiento. Y es que los tratamientos actuales aún no son capaces de detectar la metástasis en sus fases tempranas. Las técnicas de visualización de la metástasis del melanoma servirán también para investigar nuevos mecanismos que intervienen el proceso, sino que también podrían utilizarse para otros tipos de cáncer. Este trabajo científico se ha financiado por el Ministerio de Economía, L'Oreal París, Usa-Melanoma Research Alliance, la Worldwide Cancer Research, la Asociación Española contra el Cáncer, la Fundación Mutua Madrileña, la Fundación 'la Caixa', Immutrain Marie Sklodowska-Curie, ITN y con varios proyectos del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.