Bruno Casanovas y Alex Benlloch tenían solo 19 años cuando crearon en Barcelona Nude Project, una marca que en menos de una década se ha convertido en el mayor movimiento de streetwear (moda urbana) de España. Sus prendas se venden ya en más de 100 países y tienen nueve tiendas físicas en Madrid, Valencia, Barcelona, Bilbao, Milán, Lisboa, La Roca Village, Ibiza, y Ámsterdam, en las que trabajan más de 200 empleados.

Sus publicaciones las siguen en redes sociales tres millones de personas, una comunidad que ha ido creciendo con ellos y que se mantiene fiel. "Si algo nos ha traído hasta aquí, ha sido la comunidad que creyó en nosotros antes de que existiera ni siquiera un logo.”, reconoce Alex. “Cuando empezamos, solo teníamos una idea y muchas ganas de hacer algo diferente", confiesa.

Pero iniciaron su andadura teniendo claro que querían ir más allá de la moda, de ahí el lema “By Artists, for Artists”. Nude Project ha funcionado como un altavoz para creativos, artistas y gente que tenía algo que decir. A través de sus campañas, colecciones, eventos y colaboraciones, la marca ha redefinido el significado de “streetwear”.

“Nos flipa la moda, pero lo que de verdad nos engancha es lo que pasa a través de ella, la historia que cuenta. Ver a alguien en Berlín o en Milán llevando Nude como si fuera suyo, es el verdadero premio”, explica Bruno.

A pesar de su corta edad, 24 y 25 años, ya han logrado vestir a artistas de la talla de Madonna, Jaden Smith, Aitana y Rauw Alejandro.

Este año no le ha podido ir mejor a la compañía. Ha lanzado una línea de mujer con Belén Esteban y Victoria de Marichalar como imagen, ha roto todos los moldes creando una colección en colaboración con el futbolista brasileño Ronaldinho, y Bruno y Alex han protagonizado la portada del especial Forbes 30 Under 30 print en España, que reconoce a los jóvenes más influyentes del año en nuestro país. 

Ya en 2022 habían entraron en la lista Forbes Europa 30 Under 30 y en 2024 fueron portada en la edición digital europea con una entrevista grabada en Londres. 

"Se puede construir algo grande siendo uno mismo"

Lo logrado ahora cumple el sueño de aquellos chicos que hace seis años vivían en un piso compartido y vendían camisetas desde su habitación. “Algún día estaremos en la portada de Forbes”, escribieron entonces en Twitter.  Sin embargo, haber llegado hasta aquí no es una meta, sino "un punto de inflexión", recalcan. "Es una excusa para seguir creando, seguir fallando, seguir volviendo a empezar", resumen. Pero lo que sí demuestra la portada de Forbes, apuntan, es que "se puede construir algo grande siendo uno mismo".

Sin embargo, no todo ha sido fácil estos años. Estos jóvenes subrayan lo que supone la presión de emprender tan joven y la necesidad que hay de aprender a parar: “Hemos trabajado como si cada día fuera el último. Ahora sabemos que, para construir a largo plazo, también hay que saber respirar”, enfatizan.

Su trayectoria ha sido todo menos improvisada, desde que echó a andar dirigida a gente que siente que no hay que seguir todas las normas que la sociedad nos impone.

Súmate a

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio