El debate sobre el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha vuelto al centro de la discusión política tras unas polémicas declaraciones del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, que este viernes criticó duramente las subidas aplicadas por el Gobierno en los últimos años. Sus palabras no han pasado desapercibidas y han generado una oleada de reacciones, entre las que destaca el aplauidio comentario del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que no dudó en responder desde su cuenta de X (antes Twitter) con tono sarcástico e indignado.
Durante su intervención este viernes en el Congreso de la Empresa Familiar celebrado en Valladolid, Feijóo afirmó que “el incremento indiscriminado del SMI lo único que conlleva es esfuerzo salarial de las empresas, esfuerzo impositivo de los trabajadores y recaudación para el Gobierno”. Según el líder del PP, esta medida no tiene un impacto real positivo para el trabajador, sino que termina siendo una herramienta de ingresos para el Ejecutivo. “Es un buen negocio para el Gobierno”, aseguró el líder popular.
Las declaraciones no tardaron en generar respuestas. Una de las más virales fue la de Óscar Puente, que desde sus redes sociales ha expresado: “Había que dejar el SMI en 700 miserables euros y no veas el esfuerzo impositivo que se ahorraba no sé quién. Y ya si restauramos la esclavitud no veas el esfuerzo impositivo que ahorramos. Pero tú con tres sueldos, caradura”. El comentario, cargado de indignación, hace alusión a los sueldos públicos que cobra el principal dirigente de Génova.
Fejióo, en contra de las subidas del salario mínimo
No es la primera vez que Feijóo se manifiesta en contra del incremento del Salario Mínimo Interprofesional. Ya en febrero, el líder del Partido Popular relacionó el aumento del SMI con un beneficio recaudatorio para el Estado. Según sostuvo entonces: "al final, el incremento del SMI lo que supone es una subida de los ingresos del Gobierno a costa de los trabajadores y de las empresas. (…) Es cero de incremento de poder adquisitivo para el trabajador y 1.200 millones de euros de recaudación para el Gobierno”.
A su vez, el líder de la oposición criticó “la ausencia de políticas fiscales compensatorias por la inflación, es la primera vez que la tarifa del impuesto de la renta no se actualiza conforme a la inflación y, cuando la inflación acumulada en los últimos seis años es de un 21% y la inflación de la cesta de la compra sobrepasa el 38%, comprenderán que no deflactar la tarifa supone un incremento masivo de impuestos. De ahí los 140.000 millones de los que hablamos”.
A pesar de sus críticas al SMI, Feijóo manifestó en otras ocasiones su apoyo a la mejora de los salarios y a una reducción de la hiperregulación laboral. Consideró que España “necesita debatir sobre una jornada laboral más flexible”. No obstante, advirtió que esa flexibilización no debía imponerse ni utilizarse, según dijo, “para tapar los problemas de corrupción”.