La cadena británica Channel 4 ha apostado por el presentador y comediante estadounidense Jimmy Kimmel como “figura incómoda” para presentar El discurso alternativo de Navidad (The Alternative Christmas Message) que, desde 1993, emite el día de Navidad para contraponer el discurso navideño del rey Carlos III al establishment.
En su monólogo, Kimmel no ha esquivado la actualidad política y ha centrado buena parte de su intervención en criticar y reflexionar sobre el impacto del segundo mandato de Trump, a quien ha acusado de comportarse “como un rey”. De nada han servido los intentos del Gobierno de Estados Unidos de intentar silenciar al presentador de Jimmy Kimmel Live! quien lejos de tener intención de suavizar el tono, ha asumido abiertamente el papel de provocador y se ha referido al presidente republicano como “el rey Donny VIII”, ironizando sobre lo que considera una deriva autoritaria en Estados Unidos.
“Desde una perspectiva fascista, este ha sido un gran año”, ha afirmado Kimmel con sarcasmo, antes de advertir a los espectadores británicos sobre el auge del fascismo en el país y del rápido deterioro democrático que puede producirse. El comediante, intensificando su enfrentamiento con la Casa Blanca, ha aprovechado también para subrayar que los intentos de silenciar a los críticos no es solo algo que sólo sucede en Rusia o Corea del Norte e invitó a Reino Unido a no perder las esperanzas con Estados Unidos, un país que, ha reconocido, “que está pasando por un momento difícil".
En uno de los fragmentos más contundentes del monólogo, Kimmel ha descrito la situación actual de Estados Unidos con un tono grave y ha señalado -de forma simbólica y literal- que se están “desmantelando las estructuras de nuestra democracia, desde la prensa libre hasta la ciencia, la medicina, la independencia judicial y el propio edificio de la Casa Blanca", en referencia a las obras de demolición del ala este del edificio. "Estamos en un verdadero lío, y sabemos que esto también os está afectando a vosotros, y solo quiero decir lo siento", ha expresado el comediante dirigiéndose a los espectadores británicos.
El mensaje navideño de Kimmel llega tras un otoño turbulento para el presentador. Desde su regreso al aire, este ha sido un crítico constante de Trump, una postura que le costó la suspensión de manera indefinida del programa Jimmy Kimmel Live! por parte de la cadena estadounidense ABC el pasado septiembre tras los comentarios que se realizaron acerca del asesinato del activista ultraconservador Charlie Kirk durante un acto público en una universidad de Utah. No obstante, ante la reacción del público, ABC dio un paso atrás en su decisión y la suspensión tan solo llegó a durar una semana. Este mismo diciembre, el gigante Disney renovó el contrato de Kimmel hasta 2027, una decisión a la que el propio presentador no ha dudado en referirse como una victoria frente a Trump: “Ganamos nosotros, el presidente perdió”, ha afirmado ante los espectadores, asegurando que ha vuelto a estar “en antena cada noche dando al político más poderoso del mundo una merecida reprimenda”.
Además, Kimmel ha utilizado su discurso navideño para lanzar un dardo y solicitar que otros presentadores de late shows sean despedidos.
Channel 4 anteriormente invitó al consultor tecnológico Edward Snowden y al presidente iraní Mahmud Ahmadineyad a dar el mensaje navideño alternativo; pero finalmente fue Jimmy Kimmel, quien dijo que no esperaba que los británicos supieran quién era, el que aceptó.
Tras finalizar su discurso, el presentador se ha disculpado ante los espectadores británicos por exportar el caos político estadounidense al extranjero. “No todos somos como él”, ha asegurado en referencia a Trump. “Estamos pasando por un pequeño tropiezo ahora mismo, pero nos recuperaremos”.