El ‘Brad Pitt español', así se conoció a Jaime Bores, uno de los presentadores de televisión más populares de los años 90 que decidió dejarlo todo y abandonar las cámaras. Nacido el 12 de mayo de 1968 en San Sebastián, en el seno de una familia lebaniega, desde joven mostró inclinaciones artísticas: trabajó como modelo a partir de los 14 años, colaborando con la agencia Life, y compaginó estudios de Publicidad e Informática con sesiones fotográficas, spots publicitarios y trabajos como relaciones públicas en la Castellana madrileña.

Su entrada en el mundo audiovisual llegó en 1992 como disc jockey en el programa musical Los 40 Principales de Canal+, y poco después, en 1993, se incorporó a Lo que necesitas es amor (Antena 3) como azafato, junto a Isabel Gemio

No obstante, sería en Telemadrid, entre 1994 y 1997, donde labró su notoriedad como chico del tiempo en Madrid Directo, lo que le convertiría en rostro popular en la televisión autonómica madrileña, canal donde presentó las Campanadas. Su carisma atrapó la atención de TVE, que en 1997 lo fichó para presentar el talk show Digan lo que digan, programa que le reportó gran popularidad y le valió una nominación al TP de Oro como Mejor Presentador en 1998.

En esta misma etapa, Bores también se puso al frente de espacios como Tal como éramos (1998), junto a Salomé, y el concurso Quién con quién (1999), reforzando su presencia en televisión nacional. Todas las cadenas deseaban contar con su presencia, lo que le llevó a afrontar múltiples proyectos. Uno de los más destacados, la presentación de la Gala Miss España 2000, en la que protagonizó un sonado error al anunciar erróneamente a la ganadora, Helen Lindes.

Aunque el tropiezo fue comentado, él ha negado que fuera el motivo de su marcha de TVE, subrayando que su salida fue voluntaria. Así, en el año 2000 regresaba a Telemadrid para presentar el concurso Números rojos, último proyecto que lideró antes de hacer un parón en su carrera.

Su retorno se produjo en Antena 3 con espacios como La granja (2004), Pelopicopata (2005) y La buena onda de la tarde (2005). Sin embargo, volver fue complicado. Bores no gozaba de una buena relación con los equipos de redacción de los distintos proyectos, algo que terminó reconociendo años después en una entrevista en La Noria, donde justificó sus malas formas bajo el estrés. En este mismo encuentro dejó otros importantes titulares como: "Yo era el rey de la telebasura” o “No he llegado a ganar mucho dinero, aunque supe administrarlo”.

En 2011 retomó brevemente su papel en Madrid Directo en Telemadrid y en enero de 2012 también copresentó junto a Tania Llasera el programa Vuélveme loca en Telecinco, aunque el formato fue cancelado ese mismo mes ante bajos datos de audiencia. A partir de este momento, Bores decidió apartarse de los medios de comunicación para poder recuperar su anonimato: "Me fui porque quería volver a ser anónimo. Ni tengo relevancia ni la busco, es una vida tan lejana que parece la de otra persona", contó en una entrevista con ABC.

En la actualidad, Bores vive entre Madrid y Asturias y se ha reinventado como empresario hostelero, involucrado en varios negocios de restauración que administra con esa misma discreción que buscó tras cerrar su etapa en televisión.

Súmate a

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio