Hoy se celebra el día mundial contra el tráfico de personas o contra la trata, como prefieras denominarlo. Un delito que es mucho más frecuente de lo que podríamos pensar. En 2018, se registraron alrededor de 50.000 víctimas y 148 países denunciaron su existencia.

¿No sabes qué es? El Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata, publicado por Naciones Unidas, lo define como “la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación. Esa explotación incluirá, como mínimo, la explotación de la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, los trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos”.

La campaña de este año de Naciones Unidas se centra en las historias de supervivientes de este tipo de delitos

Las mujeres representan el 46 por ciento de las víctimas y las niñas, el 19

Mujeres y niñas
Según Naciones Unidas, la mitad de las víctimas detectadas fueron objeto de trata con fines de explotación sexual, y el 38 por ciento fueron explotadas para realizar trabajos forzosos.

Las mujeres siguen siendo las principales víctimas de la trata y representan el 46 por ciento. Las niñas son el 19 por ciento. De hecho, una de cada tres personas que han sufrido este delito son menores.

Una tendencia que no mejora, precisamente. La proporción de niños y niñas entre las víctimas de la trata detectadas se ha triplicado, mientras que la proporción de niños varones ha aumentado cinco veces en los últimos 15 años.

Es muy importante trabajar para restaurar a las víctimas y un punto esencial es generarles oportunidades laborales

Esclavitud
“La trata de personas con fines de explotación es la esclavitud del siglo XXI y no es neutral en cuanto al género. Impacta de forma brutal sobre las mujeres y las niñas que representan el 71 por ciento de total de víctimas y el 96 por ciento si hablamos de explotación sexual. Es muy importante trabajar para restaurar a las víctimas y un punto esencial es generarles oportunidades laborales”, nos explica Mónica Batán, cofundadora y directora de Wanawake Mujer, una ONG que trabaja precisamente para erradicar esta lacra de nuestra sociedad, entre otros proyectos.  

La campaña de este año de Naciones Unidas se centra en las historias de personas supervivientes de este tipo de delitos. Ellas son “clave en la lucha contra la trata de seres humanos”.

Según la organización internacional, es fundamental “el establecimiento de medidas eficaces para prevenir este delito, identificar y rescatar a las víctimas y apoyarlas en su camino hacia la rehabilitación”.

El mayor problema de la trata de seres humanos es la falta de conciencia

Pasar a la acción
“El mayor problema de la trata de seres humanos es la falta de conciencia. Todos los días, nos podemos cruzar con una víctima, pero no la identificamos porque no sabemos cómo leer las señales. Muchas sobrevivientes que conocí sabían que algo malo les había pasado, pero no tenían un nombre para ello”, explica Racha Haffar, fundadora y presidenta de Not 4 Trade, la primera ONG contra la trata de seres humanos en Túnez.

Racha Haffar, fundadora y presidenta de Not 4 Trade

Según ella, la educación y la sensibilización juegan un papel crítico: “La trata de seres humanos debe ser un tema que se enseñe en las escuelas, del que se hable en las noticias. Es uno de los delitos más rentables y las cifras van en aumento”.

Y, desde sus 30 años de edad, apunta a la juventud como elemento fundamental, porque “puede hacer mucho para tomar medidas contra la trata de seres humanos. No te sientes y esperes a que algo suceda. Primero, comunícate con una organización de tu comunidad local y apoya sus esfuerzos. Exhorta a tus gobiernos a que ratifiquen el Protocolo de Palermo y creen sus propias leyes nacionales o locales que respondan a los problemas de la trata de seres humanos en su contexto local”.

Algunas víctimas han sido castigadas por los delitos que fueron obligadas a cometer por sus traficantes

El drama sin fin
Naciones Unidas explica cómo el drama no termina cuando las personas son rescatadas: “Al pedir ayuda, muchas víctimas de la trata de personas se han encontrado envueltas en malentendidos o incomprendidas por la falta de conocimiento del tema. Han sufrido experiencias traumáticas tras los rescates durante las entrevistas de identificación y los procedimientos legales. Otras víctimas se han visto revictimizadas y han sido castigadas por los delitos que fueron obligadas a cometer por sus traficantes. Otras han sido víctimas de la estigmatización o no han recibido el apoyo suficiente”.

Aunque parezca mentira, este delito tiene lugar más cerca de lo que pensamos. Según la ONU, “Prácticamente todos los países del mundo están afectados por el tráfico, ya sea como país de origen, tránsito o destino de las víctimas”.