En México, como en muchos otros países, las disciplinas STEM (por sus siglas en inglés: science, technology, engineering, mathematics) siguen siendo campos con escasa representación femenina. Según datos de la OCDE, sólo entre el 30 % y el 35 % del alumnado mundial en estas áreas son mujeres. En el país latinoamericano, ese porcentaje se sitúa apenas por encima —alrededor del 38 %— pero continúa lejos de la paridad.
Frente a este reto estructural —que incluye estereotipos de género, falta de referentes y desconexión temprana con la ciencia— la educación STEM se presenta como una vía clave para fomentar la innovación, la equidad y el desarrollo sostenible.
Desde el año 2017, la Fundación Abertis y UNICEF mantienen una colaboración que comenzó centrada en la movilidad segura y la seguridad vial de la infancia y la juventud. En 2022, este convenio se renovó y se amplió a cuatro años con nuevas prioridades: entre ellas, el impulso de las vocaciones STEM para niñas y jóvenes en México, Brasil e India.
En el marco de esta ampliación, la Fundación Abertis apoya el programa STEM for girls en México, diseñado para fortalecer las capacidades de niñas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas con el fin de facilitar su incorporación a carreras técnicas en las que tradicionalmente predominan los hombres.
Elena Salgado, presidenta de la Fundación Abertis, está convencida de que acciones como ésta contribuyen a crear un mundo mejor para todos: “Impulsar las vocaciones STEM en niñas no solo es una cuestión de equidad, sino una inversión en el talento que transformará el futuro”. Desde UNICEF, Marta López Fesser afirma que esta alianza, además de estimular las vocaciones científicas entre los más jóvenes, sirve también para "provocar reflexiones y diálogos trascendentales… para avanzar hacia una sociedad más igualitaria, justa y compartida”.
El proyecto aborda la brecha en múltiples niveles: desarrolla la motivación de niñas, forma a docentes, y conecta los sectores público, privado y académico para articular un ecosistema de STEM accesible.
El proyecto conjunto ya muestra datos relevantes. Durante el primer año, se atendió a más de 6.000 niñas, niños y adolescentes en 347 escuelas localizadas en CDMX, Jalisco y Nuevo León, con la formación de más de 440 docentes.
En total, a través de las distintas iniciativas del ecosistema STEM impulsadas por la alianza, ya se han alcanzado más de 70.000 personas.
El programa incluye talleres de robótica, actividades de programación, construcción de juguetes electrónicos y espacios de intercambio que invitan a niñas y adolescentes a explorar de forma activa el mundo STEM.
A pesar de los avances, los retos siguen siendo importantes:
La iniciativa de la Fundación Abertis y UNICEF en México es un ejemplo del impacto que puede generar la colaboración entre el sector privado, organizaciones internacionales y la educación. Al promover que más niñas y adolescentes se incorporen a las disciplinas STEM, se construye un tejido más robusto para el talento, la igualdad y la innovación.
En palabras de Elena Salgado: “Cuando les abrimos las puertas de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, estamos construyendo una sociedad más innovadora, inclusiva y preparada para los desafíos globales”.
La ciencia y la tecnología no tienen género. Y esta alianza demuestra que, con voluntad, recursos y colaboración, es posible trazar caminos distintos para que las niñas también sean protagonistas del mañana.