Puede que en ambientes políticos no esté muy claro en base a qué tomar las decisiones. Pero la ciudadanía de nuestro país lo tiene claro: las mujeres y hombres que se dedican a la ciencia y la investigación saben lo que están haciendo.  

En España, ocho de cada diez personas aseguran tener al menos algo de confianza en la actividad científica y un 48 por ciento afirman tener mucha. Una cifra que nos sitúa en tercer lugar mundial en este aspecto, tras India y Australia, según una encuesta llevada a cabo por Pew Research Center.  

En España, ocho de cada diez personas aseguran tener confianza en la actividad científica 

Inversiones en la comunidad científica

El estudio también analiza la valoración de las inversiones de los gobiernos en investigación. En este caso, nuestro país se sitúa a la cabeza, con un 91 por ciento de personas que consideran que merece la pena realizarlas, nueve puntos por encima de la media y 30 sobre Francia, cuyo registro es el más bajo. 

También somos quienes más creemos que es importante ser un líder mundial en logros científicos, con un 72 por ciento y muy por encima de la media de 51 por ciento y del 21 por ciento de Holanda.  

La encuesta fue realizada antes de que el Covid-19 se convirtiera en una pandemia global y refleja que las preocupaciones de la opinión pública se centran en el cambio climático y la degradación medioambiental. 

Las personas de izquierdas tienden a confiar más en la ciencia que las de derechas 

Política 

En cuanto a afiliación política, las personas con una orientación de izquierdas tienden a confiar más en la ciencia que las de derechas. En España la diferencia no es muy acusada: diez puntos separan el 54 por ciento de quienes aseguran estar más cerca de posiciones progresistas, del 44 por ciento de quienes se sienten más afines a las conservadoras. En otros países, como Estados Unidos, la distancia es mucho mayor: 42 puntos porcentuales.  

Sin embargo, las variaciones por ideología política no se reflejan en otros aspectos de la actividad científica: “Por ejemplo, las diferencias son generalmente modestas o inexistentes entre la derecha y la izquierda en cuanto a si la comunidad científica tiende a realizar juicios basados solamente en hechos o si es igual de probable que estén sesgados como los del resto de la gente”, explican los autores del estudio en sus conclusiones.   

Dos tercios aseguran preferir para solucionar probleamas a alguien con experiencia antes que con conocimiento 

Experiencia mejor que conocimiento 

En lo que sí parece haber acuerdo es en que, a la hora de solucionar problemas, es preferible confiar en alguien que tenga experiencia, que en una persona experta. Así lo afirma una media de dos tercios, mientras que solo el 28 por ciento opta por quienes tienen el conocimiento, aunque no hayan afrontado nunca situaciones similares.  

No así en el uso de inteligencia artificial y la automatización del trabajo, en el que las discrepancias son significativas. En Singapur, un 72 por ciento considera que son buenas para la sociedad, frente al 37 por ciento que opina lo mismo en Francia. En España, un 60 por ciento lo ve como algo positivo y un 26 por ciento, como algo negativo. Ligeramente más a favor que la media mundial que se sitúa en 53 por ciento y 33 por ciento, respectivamente.  

Otro aspecto en el que nuestro país se sitúa a la cabeza, junto a Suecia y Australia, con ocho de cada diez respuestas a favor, es el impacto positivo de la vacunación infantil en la salud.