Hoy no ha sido un buen para la economía española. La Seguridad Social registra una pérdida de 212.984 afiliados (-1,09 por ciento), el peor dato obtenido desde el año 2008 y el segundo peor en lo que va se siglo. Las cifras, reveladas este martes por el Ministerio de Trabajo, son un signo más de que España no va bien, al menos en materia económica.

Tras el incremento del número de afiliaciones en el mes de agosto, caracterizado por la elevada estacionalidad laboral ligada al periodo vacacional, el final de la temporada estival destaca por la destrucción de empleo temporal, sin embargo, las cifras, comparadas con el mismo periodo de años anteriores, vuelven a situar a España en la casilla de salida hacia la recesión.

Pese a que el Ministerio de Trabajo destaca que, el total del número de afiliados a la Seguridad Social, 19.320.227, es el mayor desde que hay registro, lo cierto es que el aumento del número de parados en el mes de agosto -54.371 personas respecto al mes de julio- supera a los del mismo mes en años anteriores: en 2018 perdieron su trabajo 47.047 personas y en 2017 46.400 personas.

Un jarro de agua fría que irrumpe en un clima de incertidumbre política. Susana Díaz Pacheco, Secretaria General del PSOE en Andalucía, hacia saltar la voz de alarma, tras conocer el dato, en redes sociales: “No es una buena noticia. Agosto es un mes tradicionalmente malo para el empleo, pero la bajada del paro en términos interanuales empeora con respecto a la de años anteriores”.

Una sangría para el SEPE

Efectivamente, los datos registrados no son una buena noticia. Durante este mes se han producido una media de 7.000 despidos al día. Concretamente, el día 30 de agosto, el penúltimo del mes, se registraron más de 12.000 despidos en una sola jornada y el 31, que este año cayó en sábado, se estima que se superaran los 64.000 despidos.

Por sexos, el paro afecta a más hombres que mujeres. El desempleo masculino aumentó a en 31.051 personas mientras que el femenino en 23.320 personas. También ha crecido el paro entre los jóvenes menores de 25 años en un 2,82 por ciento, es decir, 6.182 personas que se suman a la kilométrica lista del SEPE y que, además de al desempleo, se enfrentan a la precariedad laboral característica de los tiempos que corren.

De hecho, un dato que preocupa a los expertos es precisamente el de la precariedad laboral. Los datos revelan que Sanidad, suma más 22.000 desempleados a su sector y Educación, más de 59.000. Son los denominados parados forzosos a quienes se rescinde el contrato para evitar pagar vacaciones. Además, la temporalidad en los contratos alcanza el 92 por ciento, cifra que impacta sobre la estabilidad y el desarrollo del país. Trabajo dice que le preocupa la temporalidad, pero que hay necesidades que se cubren mejor con este contrato. A este respecto, Octavio Granado, Secretario de Estado de Seguridad Social, ha afirmado este martes que, aunque se sigue abusando del contrato temporal, “hay necesidades en el mercado laboral español que se cubren mejor con este tipo de contrato”. A pesar de las cifras, parece que hay cosas que se resisten a cambiar.

Los datos del paro impactan sobre la bolsa

Al cierre de bolsa, el Ibex 35 abandona, por segunda jornada consecutiva, su racha alcista. Los inversores, que se han enfrentado este martes a los datos revelados por el Ministerio de Trabajo, han cerrado la sesión con una caída del 0,07 por ciento, consiguiendo recuperarse unas décimas en la recta final de la jornada alcanzando los 8.809 puntos. En últimas posiciones del ranking, Bankia y Banco Sabadell han sido los valores más deprimidos al cierre de la sesión con descensos del 1,9 por ciento y el 1,6 por ciento, respectivamente. Les siguen, Bankinter con una pérdida del 1,3 por ciento y  Banco Santander, que pierde un 1 por ciento. BBVA y CaixaBank  han moderado su posición con subidas del 0,2 por ciento.

A la publicación de los datos del paro, se le une, la incertidumbre política nacional -España continúa debatiéndo si formar Gobierno o dirigirse a nuevas elecciones- e internacional: el Brexit, la grave crisis Argentina, que condicionará las próximas semanas, y la posible suspensión del acuerdo de Gobierno alcanzado en Italia entre el Movimiento 5 Estrellas y el Partido Democrático.