Pedro Sánchez anunció este martes que el Ejecutivo prevé medidas de calado para hacer frente a la subida de los aranceles planteada por la administración Trump en caso de que esta se materialice. Un plan de acción que se sustenta en la rebaja de las peonadas necesarias para acceder al subsidio agrario, principal preocupación mostrada durante el mitin celebrado en Jaén por el presidente de la Diputación.

No es la primera vez que esto sucede, ya que Mariano Rajoy ya rebajó de 35 a 20 las peonadas necesarias en febrero de 2018 debido a la sequía que imposibilitaba llegar al mínimo legal para poder cobrar el subsidio y la renta agraria.

El presidente del Gobierno en funciones no ha especificado cuántas peonadas serán necesarias para poder acceder a la contribución, pero, citando al ministro de Agricultura Luis Planas, el líder socialista ha anunciado un plan de choque contra los aranceles y los presagios de que esta campaña de aceituna será especialmente dolosa para los intereses de los principales productores de aceite del país.

Sin embargo, el PER (actualmente se denomina Programa de Fomento de Empleo Agrario, PFEA) cuenta con muchos detractores. A pesar de contar con el apoyo de la totalidad de los partidos en las comunidades que se benefician de la medida, siempre hay quien induce a pensar que este cobro hace que muchas personas prefieran continuar como desempleados a trabajar cuando tienen posibilidad de hacerlo.

Nada más lejos de la realidad. Analizando el último informe de subsidio agrario y renta agraria elaborado por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, podemos ver que respecto del total de las prestaciones por desempleo, el subsidio agrario y la renta agraria suponen, para el periodo acumulado en el año hasta el mes de junio de 2019, el 5,11% del gasto total y el 10,01% de las personas beneficiarias.  

Un total de 466, 84 millones de euros destinados a pagar este tipo de retribuciones, mientras que la totalidad de prestaciones aumenta hasta los 8.669, 36 millones de euros. En decdlaraciones a ElPlural.com, desde UGT afirman que "el sistema de subsidio y renta agraria permite el sostenimiento de áreas rurales, evitando el despoblamiento, la huida de recursos humanos, y el "olvido" de grandes zonas rurales (España vaciada). Además, facilita la modernización de las actividades agrarias y su sostenimiento".

Beneficiarios

Las condiciones para acceder a este tipo de subsidios no son halagüeñas. Tal y como se explica a la perfección en la página oficial del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), para acceder a la paga es necesario haber cotizado un mínimo de 35 jornadas en los doce meses naturales inmediatamente anteriores a la situación de desempleo, salvo si ha sido beneficiario o beneficiaria del Empleo Comunitario en 1983, en cuyo caso podrá acceder de nuevo al subsidio agrícola con solo 20 jornadas cotizadas al SEASS y/o con cotizaciones en trabajos del AEPSA. Las personas mayores de 35 años o menores con responsabilidades familiares podrán completar las 35 jornadas con las cotizaciones en el AEPSA.

Además, las unidades familiares no pueden superar una determinada cantidad de ingresos mensuales para acceder a estas cuantías:

  • Para unidades familiares de dos miembros, 2 veces el SMI.
  • Para unidades familiares de tres miembros, 2,75 veces el SMI.
  • Para unidades familiares de cuatro miembros, 3,50 veces el SMI.
  • Para unidades familiares de 5 o más miembros, 4 veces el SMI.

Cobro y duración

Quedando acreditados todos los pormenores previamente mencionados, el cobro retribuido por el subsidio agrario es del 80% del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), cuantificado este 2019 en 537,84 euros. Por lo tanto, el importe que perciben los demandantes de este subsidio es de 430,27 euros mensuales.

Además, los menores de 52 años solo podrán acceder a este subsidio 180 días, mientras que los mayores de esta edad la cobrarán entre 300 y 360 días.

Cantidad de beneficiarios y gasto acumulado

Tanto las personas que se benefician de este cobro como el gasto del Estado han ido disminuyendo con el paso del tiempo. El informe realizado por el SEPE de junio de este mismo año aclara que en 2015 193.581 personas se beneficiaron del subsidio agrario, costando al erario 315,36 millones de euros. En 2018, fueron 186.855 personas y 289,57 millones.