En su documento, el Gobierno ve negativa la estabilidad en el empleo, que achaca a que en España el despido “es relativamente más caro y limitado que en otros países”, informa Público.

Los ERE más rápidos
Sobre la supresión de la autorización administrativa en los ERE, el Ejecutivo alega que se pretende "ganar en celeridad" y "corregir la tendencia a llegar a un acuerdo consistente en el pago de elevadas indemnizaciones" para evitar que la autoridad laboral entre a examinar los despidos. El Gobierno pretende “normalizar” el uso del despido colectivo "a un coste “más razonable": 20 días por año y un máximo de 12 mensualidades.

La implicación de las ETT
El Ejecutivo explica, por otra parte, su decisión de contar con Empresas de Trabajo Temporal (ETT) como agencias de colocación, que utilizará, según dice para detectar a los parados que no quieren trabajar o que se encuentran en la economía sumergida, cuando estos rechacen de manera reiterada ofertas de empleo.

Detectarán a los parados que quieren seguir parados
Según explica el documento, la incorporación de las ETT "permitirá que los desempleados sean contactados más frecuentemente para acudir a entrevistas de trabajo o ser contratados. De esta manera, si están trabajando de forma fraudulenta o no están verdaderamente interesados en trabajar, serán expuestos y perderán la prestación".

Las nuevas condiciones
Si se rechaza una oferta de trabajo "adecuada", el parado perderá la prestación por desempleo durante tres meses; si rechaza una segunda oferta, perderá el seguro de paro durante seis meses; y si reincide por tercera vez, perderá completamente el derecho a la prestación.