El Banco Central Europeo (BCE) ha cumplido con lo que esperaban los mercados y ha aprobado una nueva bajada de los tipos de interés, claves para el Euríbor y las hipotecas. El organismo presidido por Christine Lagarde ha tomado una nueva decisión en política monetaria que se lleva el tipo de referencia al 3,25% después de reducirse en 25 puntos básicos. La decisión del Consejo de Gobierno del supervisor único viene motivada por la gran marcha de la zona euro (1,7%), que se ubica ya por debajo del objetivo del 2%.
La decisión de bajar el tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito, palanca del organismo para guiar la orientación de la política monetaria, se basa en su “evaluación actualizada de las perspectivas de inflación, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria”, recoge el comunicado del Consejo de Gobierno. “La información más reciente sobre la inflación muestra que el proceso de desinflación continúa conforme a lo previsto”, añade.
Asimismo, el supervisor único ha reconocido que las perspectivas evolución de los precios se ven afectadas por “las recientes sorpresas a la baja en los indicadores de la actividad económica”. “Al mismo tiempo, las condiciones de financiación siguen siendo restrictivas”, añaden. Pese a la buena marcha, desde el BCE esperan que la inflación crezca en los próximos meses para después volver hasta el objetivo del 2% durante 2025.
Actualmente, la tasa de la eurozona se ubica el 1,7% interanual, dato más bajo desde abril de 2021 y medio punto por debajo de la subida del 2,2% observada el mes anterior, según el dato confirmado este jueves por Eurostat, oficina estadística europea. La desaceleración de los precios en el área de la moneda común fue reflejo de la caída del 6,1% en el coste de la energía, mientras que los alimentos frescos repuntaron al 1,6%, cinco décimas más. Al descontar el impacto de la energía, la tasa de inflación se redujo una décima al 2,6%.
La buena marcha tranquiliza al BCE, pero se cubre las espaldas con las incertidumbres futuras. “El Consejo de Gobierno tiene la determinación de asegurar que la inflación vuelva a situarse pronto en su objetivo del 2 % a medio plazo y mantendrá los tipos de interés oficiales en niveles suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario para lograr ese objetivo”, recoge el comunicado, pese a que ya se sitúa por debajo de ese nivel. Además, aseguran que continuará aplicando un enfoque dependiente de los datos, en el que las decisiones se adoptan en cada reunión, para determinar el nivel de restricción y su duración apropiados”
Afectación a las hipotecas
Las bajadas de tipos de interés siempre son una buena noticia para las hipotecas, tanto para las nuevas que puedan constituirse como para las variables ya suscritas. Sin embargo, analistas del mercado aseguran que “apenas afectará” en esta ocasión porque la banca ya lo han aplicado. "Los bancos ya están echando el resto en este último trimestre del año y están ofreciendo tipos de interés en sus hipotecas muy agresivos, que no veíamos desde 2022”, trasladan desde iAhorro, asesor hipotecario.
La firma considera que es "muy difícil" que, de aquí a final de año, las ofertas puedan mejorar. No obstante, no descarta que alguna entidad todavía no haya ajustado "tanto" sus precios y que podría entrar en esta "guerra hipotecaria" y ofrecer productos "muy competitivos" para lograr sus objetivos de finales de año. Más allá de la propia pugna empresarial, el director del comparador hipotecario, Simone Colombelli, considera que el Euríbor continuará bajando levemente.
"Podríamos concluir que las decisiones del BCE, las caídas del Euríbor y las rebajas por parte de los bancos de los precios de sus hipotecas están haciendo que estos meses sean los mejores para hipotecarse", afirma. Sin embargo, de cara a 2025 existen dudas. "Si la situación no empeora, es probable que también sea un buen año a nivel general, pero es mucho especular", desgrana Colombelli.