El Ejecutivo ha recordado a los cerca de 900.000 agricultores y ganaderos que eligen el sistema de módulos del IRPF para tributar que pueden acogerse a una reducción del 20% en el rendimiento neto, aprobada para todo el sector agrario. A esta rebaja se suman las reducciones de los índices de rendimiento neto para el ejercicio de 2021 en el sistema de módulos de IRPF. Reducción recogida en una orden del Ministerio de Hacienda, publicada el pasado mayo a propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, tras recabar informes de las comunidades autónomas de minoración de dichos índices.

Agricultura estima que el conjunto de todas estas reducciones de módulos, supondrán una rebaja en la base imponible de 1.093 millones de euros, que beneficia a estos 900.000 agricultores y ganaderos. Este sistema de módulos es el mayoritario entre los agricultores y ganaderos españoles y las reducciones de módulos aprobadas en esta orden se traducen en una disminución proporcional de la base imponible derivada de los rendimientos de la actividad agraria.

El Ministerio de Agricultura ha precisado que estas reducciones reflejan la pérdida de rentabilidad del sector primario derivada de los efectos provocados por las adversidades climáticas del pasado año, como la borrasca Filomena, las heladas de marzo y la falta de precipitaciones a lo largo del año. Además de las reducciones estatales, se han aprobado un elevado número de reducciones en sectores específicos por parte de comunidades autónomas, provincias y municipios, destacando la aplicada para frutos secos en las áreas productoras.

De forma extraordinaria, para todos los ganaderos que alimenten al ganado con piensos y productos de terceros y presenten más del 50% del importe total de la alimentación del animal, se reduce también el índice aplicable a las actividades ganaderas. Se estima que la reducción por este concepto puede alcanzar los 38 millones de euros y el índice único para todos los sectores ganaderos será del 0,50.

Para agricultores, se hace extensible a todos los cultivos la reducción del precio de la electricidad, que en años anteriores solo se aplicaba a los regadíos estacionales. De esta forma, los agricultores que utilizarán la electricidad para el riego se beneficiarán de una minoración del 25% en el rendimiento neto para cultivos regables (el año anterior fue del 20%). Se estima que esta medida supondrá una rebaja de unos 39 millones de euros aproximadamente.