Es un término que se viene utilizando en relación con la COP25 (la Cumbre del Clima de Madrid) y sí, existe. Según ha publicado FUNDEU (la Fundación del Español Urgente), neonegacionismo es un término válido formado por el prefijo neo-, ‘nuevo’, y el sustantivo negacionismo

La voz alude a “una nueva actitud que no niega la existencia del problema como hacía el negacionismo clásico, pero que en la práctica no trabaja para combatirlo”, explica la fundación en un comunicado, y enuncia dos ejemplos: “Tras la oleada de conciencia colectiva surgida del Acuerdo de París, el neonegacionismo toma nuevas formas a la hora de retrasar la puesta en marcha de lo acordado hace solo cuatro años”, expresa. “¿Estamos a salvo del neonegacionismo climático?”, añade.

Así, neonegacionismo es un sustantivo válido construido sobre la base del término negacionismo, “que alude a las doctrinas que rechazan algún hecho importante generalmente aceptado, en especial hechos históricos o evidencias avaladas por la ciencia o por los datos”. Por tanto, “viene a aludir a una nueva fase respecto del negacionismo clásico. Si este negaba, primero, la existencia del cambio climático, luego no negaba su existencia, pero lo atribuía a causas naturales y no a la acción humana y, finalmente, admitía el problema, pero aducía que la humanidad era incapaz de solucionarlo, el neonegacionismo”, explica Fundeu.