El diario de Pedro J. insiste hoy en la campaña que abría este lunes para denigrar a una testigo que indentificó a Jamal Zougam como autor material de los atentados del 11-M. La última investigación con la que El Mundopretende oxigenar las teorías conspirativas a la masacre cuestiona el testimonio de una testigo protegida -y de la que ofrecen múltiples datos, como la ciudad en la que vive en la actualidad- y resaltan sus presuntas contradicciones, insistiendo en que fue clave para condenar a Zougam.

"Declaración irrelevante"
Apenas unas horas después de que El Mundo iniciara esta serie de informaciones, algunos internautas anónimos avezados en cospiranoias ya las habían echado por tierra. Y es que el intento de desacreditar la identificación que hace ahora el diaro de Pedro J. ya lo puso en práctica el abogado de Zougam en su recurso al Tribunal Supremo contra los 43.000 años de condena contra su detenido.

El TS no dejaba lugar a dudas cuando desestimó el recurso (ver página 602 de la sentencia):

Sin embargo, aún dando por cierto lo que el recurrente manifiesta en su recurso lo cierto es que la declaración de este testigo no vendría a ser necesaria, pues resulta redundante en relación con un hecho que ya estaría suficientemente acreditado sin necesidad de acudir a su declaración. Tal hecho es la presencia en el tren del recurrente [Zougam] acreditada suficientemente por la declaración de dos testigos directos, cuya versión considera verosímil el Tribunal de instancia, valoración probatoria que no se puede considerar ilógica o arbitraria. Por lo tanto, en realidad la declaración de este testigo es irrelevante en orden al sentido final de la valoración de la prueba.


Otros elementos de juicio
El Supremo también subrayaba otros elementos por los que había sido condenado Zougam, como sus relaciones con otros terroristas de la célula y el hecho de que les facilitara las tarjetas con las que se confeccionaron los artefactos.

Auque El Mundo pasa de puntillas por los puntos más escabrosos del perfil de Zougam, éste ya  había sido investigado por la policía marroquí y francesa por sus contactos con extremistas. El diario se aferra a los testimonios de descargo de la familia del condenado, su madre y un hermano, que aseguran que dormía cuando se cometieron los atentados. Sobre este punto ya se pronunció el juez Bermúdez en la sentencia en primera instancia, recordando que cuando el hermano de Zougam declaró por primera vez a la policía no mencionó en ningún momento que Zougam estuviera durmiendo en el momento de los atentados, y ello a pesar de que acababa de ser detenido en relación a esos hechos. Durante el juicio se retractó de las contestaciones policiales que pudieran comprometer a su hermano.

El abogado que intentó mezclar a ETA
El juez Bermúdez apuntaba en su sentencia una curiosidad sobre el abogado de Zougam: fue el letrado que durante el juicio intentó vincular a ETA con los atentados. Una vía de defensa que permitió a El Mundo rellenar muchas páginas y justificar así la hipótesis de la autoría de ETA que difundió inicialmente el PP tras la matanza para ganar las elecciones.