Si hace un año, con la anterior dirección, Telemadrid conseguía el mejor arranque de temporada en una década y con los principales programas informativos en sus mejores registros de audiencia en años, con la nueva dirección elegida por Isabel Díaz Ayuso el arranque de curso ha sido catastrófico.

A pesar de que los datos han sido paupérrimos, los grandes damnificados han sido los programas informativos de la cadena. La media del mes de la cadena se sitúa en el 4,6%, hace un año estaba en el 5,8% de share (cuadro décimas más que en septiembre de 2019) y superaba a otras cadenas nacionales como Cuatro.

'120 minutos', presentado por María Rey anotaba un 11,5% de share en 2020, un dato que no se alcanzaba en esta franja en Telemadrid desde el año 2008. Ahora, con la nueva dirección, se ha quedado en un 8,8%, lo que supone un 22% menos.

La cosa no se queda ahí. Tras el despido de Lourdes Maldonado, el 'Telenoticias 1' presentado por Víctor Arribas ha bajado otro 22% pasando del 12,6% de 2020 al 10% de 2021. Hace un año, las noticias del mediodía llegaban a anotar un 18.1% de share en días concretos, según datos de la propia cadena.

Tampoco Cristina Ortega, la nueva presentadora del 'Telenoticias 2' convence a la audiencia. Si el inicio de temporada de Rocío Delgado y Manu Pérez marcaba una media del 8,1% de share, ahora se quedan en un 6,2% (-22%), casi dos dígitos menos.

En el fin de semana se encuentran los peores datos. La primera edición del 'Telenoticias' presentado por Pedro Jota Rodríguez y Carmen Estañ se estrellan perdiendo un 33% de la audiencia pasando del 13% al 8,7% de share, 4,3 puntos menos.

Si Silvia Intxaurrondo lograba también otro récord en la edición de prime time de 2020, con un 7,6% de share en septiembre, el mejor dato en los últimos 11 años, la segunda edición se estrella con los nuevos rostros al 6,8%.

10% menos de presupuesto

El administrador provisional de Telemadrid, José Antonio Sánchez, ha traslado este viernes al comité de empresa que "la reducción del 10% del Presupuesto para la compañía para 2022, pactada por PP y Vox, no va a suponer una reducción de plantilla".

De ello ha informado el propio comité, a través de un comunicado, después de reunirse con Sánchez esta misma mañana. En la cita, según han informado, Sánchez ha asegurado "que esa reducción presupuestaria no va a afectar tampoco a los gastos fijos de la compañía ni a las nóminas de los trabajadores".

Además, han asegurado que ha dejado claro que "se mantendrá también la inversión prevista para la renovación tecnológica de la compañía". La intención que ha trasmitido es "ahorrar en la contratación de programas reduciendo su coste y mejorar los ingresos publicitarios".

En todo caso, desde el comité han expresado al administrador provisional su "preocupación" por "las consecuencias negativas para la calidad del servicio público de Radio Televisión Madrid de una reducción tan importante del Presupuesto".

Si baja la audiencia baja la inversión publicitaria

Sorprenden las palabras de Sánchez ya que el bajón de audiencia se traduce directamente en una bajada de los ingresos por publicidad. La cuota comercial de Telemadrid se lastra como activo comercial en el mercado de la Forta.

Si los espectadores sintonizan menos con Telemadrid, los anunciantes pagan menos y se quieren publicitar menos en la cadena. Si se van a reducir los ingresos un 10%, que entre menos dinero procedente de la publicidad pone en riesgo a la cadena.

Un recorte por interés partidista

El recorte se producía después de que la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, firmara este jueves con el consejero de Presidencia, Enrique López, un documento que recogía este punto a cambio de ratificar a José Antonio Sánchez con sus votos, administrador provisional de la cadena.

El comité de empresa, que "el Gobierno del PP firme un acuerdo que va en contra de lo firmado hace cuatro meses en el contrato, muestra la inconsistencia e improvisación con la que se están produciendo todas las decisiones que afectan al servicio público de comunicación de los madrileños desde las elecciones autonómicas del pasado mes de mayo".

Consideran que "esta incertidumbre debilita el proyecto de RTVM sustentado en la ley 8/2015, defendida por la propia presidenta, Isabel Díaz Ayuso". En este sentido, han hecho hincapié en que es "la radio televisión autonómica más barata por habitante'' de todo el estado, 11,8 euros anuales por madrileño. Además, han incidido en que en el año 2020, RTVM ha tenido un superávit presupuestario de 4,5 millones de euros.

También han hecho hincapié en que "la plantilla actual es la más ajustada de todas las televisiones autonómicas y el porcentaje de gastos de personal sobre el presupuesto global es uno de los más bajos, según las propias palabras del Gobierno".

"Queda claro que no hay ninguna razón económica que justifique esta reducción presupuestaria'', aseguran. Por eso consideran que este acuerdo ''solo se puede entender desde el desprecio a la labor de servicio público y desde el desconocimiento de su estructura y funcionamiento". "Lo que ha primado son los intereses partidistas de ambos", dicen. 

Por un lado, "la necesidad del Partido Popular de ratificar a José Antonio Sánchez tras la chapuza de su reforma legislativa por el control de la cadena y, por otro, la de Vox, que busca un titular que haga creer que tiene peso en la toma de decisiones en la Comunidad de Madrid".