En una noticia anterior en relación al pago que el Gobierno de la Junta de Andalucía de PP y Cs con el apoyo externo de VOX, está haciendo a la formación ultraderechista de Abascal, nos referíamos a la drástica reducción. y en algún caso eliminación absoluta, que el Ejecutivo de Moreno Bonilla está ha hecho con las asociaciones y colectivos de mujeres que trabajan por la Igualdad, la participación o la lucha contra la violencia de género.
2020 fue el año que VOX señaló como el momento en que sus políticas se verían aplicadas en la acción diaria del gobierno andaluz. Y así ha comenzado a vislumbrarse de manera concreta.
“Salud sexual y reproductiva” en manos de antiabortistas y homófobos
Hoy se conoce tras la publicación en el BOJA del 8 de enero el fantasmagórico y extrañísimo nombramiento que el Gobierno autonómico ha realizado al nombrar como Coordinadora de la Estrategia de Salud Sexual y Reproductiva de Andalucía a Trinidad Lechuga, médico de familia que actualmente es la directora de Secretariado para los Cristianos Perseguidos adscrita a la Diócesis de Córdoba.
Solo contraponiendo las denominaciones del cargo de la Junta y el del ente del Obispado cordobés hacen saltar chispas y chirría como responsabilidades opuestas y contradictorias. Si vamos a las competencias de ambas responsabilidades, se percibe claramente que las ideas antiabortistas, machistas, homófobas y ultramorales se van a instalar en la acción de la Consjería.
El consejero de los 140 amigos y de la crisis de la lifteria
El nombramiento de la Consejería de Salud y Familias del Gobierno andaluz (otra denominación, la de “y Familias”, fue otra concesión a VOX) ha sido recientemente publicada como puede verse en el documento adjunto. Depende del consejero Jesús Aguirre, el de la desastrosa gestión del brote de lifteriosis y que generó enorme polémica cuando recién nombrado dijo: “En tres días ya teníamos montado Salud, 140 amigos míos”, bastante de ellos cesados o dimitidos por cierto en menos de un año.
Aborto, “crimen abominable” y Plan Unesco para crear homosexuales”
La responsabilidad que la nueva coordinadora de Salud Sexual y Reproductiva de la Junta tiene en la Diócesis de Córdoba es de una entera confianza del polémico Obispo, Demetrio Fernández. Un prelado, que como denunció ElPlural.com, es conocido por sus claras convicciones homófobas y antiaborto así como por mantener posiciones ultramoralistas y reaccionarias en materia sexual. El purpurado califica el aborto como "crimen abominable" y al hecho de practicarlos como "matanza de inocentes". Define la fecundación in vitro como “aquelarre químico”. Afirma sobre la relación de pareja que "cuanto más varón sea el varón, mejor para todos en la casa". Fernández se inventó un supuesto plan de la UNESCO para "crear" homosexuales y se negó a confirmar a un homosexual… todo ello mientras hace caja con la Mezquita. Lógicamente los colaboradores de la Diócesis participan de esa atmósfera ultramontana que el Obispo transmite, como es el caso de Trinidad Lechuga Varona.
Avalada por ser “médico de familia”
Para justificar el nombramiento de la nueva coordinadora, la Junta ha alegado solo que posee una “amplia experiencia en medicina de familia” y calla su labor como directora de Secretariado para los Cristianos Perseguidos de la Diócesis de Córdoba.… y nada más. Es curioso, a la par de extraño- que en el texto oficial de su nombramiento -y que circula ya masivamente por redes sociales- se especifica que “la persona Coordinadora de la Estrategia de Salud Sexual y Reproductiva de Andalucía conservará la vinculación jurídica existente con su institución de procedencia” y que “las indemnizaciones que procedan a favor esta por los desplazamientos que hubiese de realizar por razón de servicio se liquidarán por su institución de origen, con arreglo a la normativa vigente”.
Su labor será la de coordinar la totalidad de las iniciativas vinculadas a la salud sexual. Obviamente incluye en ella lo relacionado con el aborto o los métodos anticonceptivos, la transexualidad… Con solo ver el ideario de Vox en estas materias o la filosofía de trinchera del Obispo de Córdoba, podría decirse que mal futuro se puede augurar para los andaluces en materia de “Salud Sexual y Reproductiva”, malo no, pésimo.
Las redes arden tras conocerse este polémico nombramiento. Muchas de las inserciones en Twitter exigen saber qué certificaciones y titulaciones tiene la nueva coordinadora Trinidad Lechuga, “directora del Secretariado de Cristianos Perseguidos, para poder hacerse cargo de la estrategia de salud sexual y reproductiva andaluzas.