Giro importante en la estrategia sanitaria de la Junta de Andalucía para neutralizar los efectos del consumo de carne contaminada por listeria. El portavoz del gabinete técnico de la Consejería de Salud, José Miguel Cisneros, confirmaba ayer un nuevo aborto y el caso de un niño con cáncer muy avanzado y anunciaba la administración del antibiótico amoxicilina a las embarazadas asintomáticas que hayan sido consumidoras de carne mechada fabricada por Magrudis.

De esta forma, informó Cisneros, los médicos de familia y ginecólogos de la sanidad pública y privada aplicarán el nuevo protocolo de atención a las embarazadas asintomáticas que hayan estado expuestas al consumo de carne mechada. Hasta ahora, el protocolo se limitaba a las embarazadas con síntomas de infección leve. El número de pacientes afectados en Andalucía es de 205, los hospitalizados son 46y las embarazadas afectadas 14.

En manos del juez

Mientras tanto, la Fiscalía de Sevilla acordó ayer cerrar las tres investigaciones que había iniciado por las denuncias presentadas por la listeriosis y trasladar la investigación al Juzgado de Instrucción número 10 de Sevilla, para unirlas a las que mantiene abiertas presentadas por particulares afectados.

Las denuncias presentadas ante la Fiscalía de Sevilla han sido por la Consejería de Salud y Familia, el día 21 de agosto, contra la empresa Comercial Martínez León para que investigara si comercializó carne mechada reenvasada de Magradis como marca blanca. Otra segunda de esta misma administración el día 29 por obstrucción a la actividad inspectora al detectar productos de Magradis que no estaban incluido en la lista de los productos que comercializaba. Y una tercera del Ayuntamiento de Sevilla, el día 30 de agosto, en la mima línea por distribuir productos no declarados.

Reunión institucional

Por lo demás, el consejero de Presidencia Elías Bendodo, el consejero de Salud Jesús Aguirre y el alcalde de Sevilla Juan Espadas se reúnen este jueves para intentar una puesta en común de todo lo realizado por ambas administraciones, enfrentadas a raíz de haber acusado la Junta de Andalucía al Ayuntamiento de falta de colaboración y de suministrarle la información “con cuentagotas”.

Aun así, en su comparecencia pública del pasado martes el consejero Bendodo rebajó sensiblemente el tono acusatorio utilizado unos días antes por el consejero Aguirre en su comparecencia en el Parlamento y por el propio Bendodo en anteriores intervenciones públicas.