Un ayuntamiento de una ciudad tan importante de la Costa del Sol como Benalmádena ha perdido su independencia económica tras la anulación del presupuesto municipal y su intervención por parte de la Junta de Andalucía.
La tormenta financiera y política se abate sobre Benalmádena. La gestión del gobierno del alcalde del PP, Juan Antonio Lara, ha llevado al Ayuntamiento a un punto crítico: la intervención de sus cuentas por la Consejería de Hacienda y la obligación de aprobar un plan de ajuste que marcará el futuro económico de la ciudad.
El incumplimiento de la regla de gasto en 2024 ha sido el detonante de esta crisis. Con un incremento del presupuesto municipal hasta los 101,4 millones de euros, un 20,26% más que el año anterior, el Ayuntamiento ha superado de manera alarmante el límite del 2,6% fijado por el Gobierno central. La consecuencia inmediata ha sido un recorte de 33 millones de euros en diciembre de 2024 para evitar incurrir en déficit y, ahora, la imposición de un Plan de Ajuste que compromete la estabilidad financiera del municipio. Esta desviación, cifrada en 16,3 millones de euros, ha llevado a la intervención de las cuentas municipales, según un informe del interventor.
Recortes y subidas de impuestos
Para corregir esta situación, el Ayuntamiento deberá someter a aprobación en un Pleno extraordinario el próximo 7 de abril un plan económico-financiero para los ejercicios 2025 y 2026. Sin embargo, el documento no contempla medidas específicas, argumentando que el equilibrio presupuestario se restablecerá de “manera natural” en los próximos años, una afirmación que la oposición cuestiona y no considera creíble. Según el informe, el incumplimiento se debe al uso del remanente de tesorería y a la ejecución casi total del presupuesto, que en 2023 alcanzó el 100%.
Este nuevo ajuste presupuestario llega tras el requerimiento del Gobierno central en mayo de 2024, cuando solicitó anular el presupuesto municipal por un posible desequilibrio entre ingresos y gastos, aunque en aquel momento no se vinculó directamente al incumplimiento de la regla de gasto.
La oposición avisaba de que esto iba a suceder
Mientras tanto, la oposición socialista, que desde hace meses venía advirtiendo de esta grave situación y denunciando los muchos gastos superfluos del Ayuntamiento, ha calificado la gestión económica del alcalde como “nefasta”. Además, lamenta que, con esta decisión de la Junta de Andalucía, los ciudadanos de Benalmádena “pierden su independencia económica, presupuestaria y fiscal, para pasar a estar tutelados/intervenidos por la Consejería de Hacienda”.
El PSOE subraya que “en menos de dos años, el gobierno de Lara ha despilfarrado tanto que ahora toca ajustarse”, lo que, a su juicio, conllevará recortes y subidas de impuestos. Para ilustrar la situación, han señalado de manera gráfica que “los hombres de negro” han llegado a Benalmádena para declarar nulo el presupuesto municipal”.