El intervencionismo va por barrios: sí para agricultores, pero no para inquilinos; sí mejorar la renta agraria, pero no para dar un respiro a los jóvenes de las grandes ciudades que solo pueden acceder a una vivienda si la comparten con más personas.
La Junta de Andalucía, gobernada por PP y Cs, se ha posicionado con rotundidad a favor de los agricultores, que reclaman al Gobierno central que intervenga en la cadena de precios, mantenga las subvenciones europeas de la PAC o ponga freno a la entrada en la UE de productos de terceros países, pero al mismo tiempo ha mostrado su oposición frontal al anuncio "intervencionista" de ese mismo Gobierno central de limitar los precios del alquiler en determinados ámbitos urbanos.
Más vivienda pública
Frente a "las propuestas intervencionistas del mercado del alquiler" propugndas por el ministro José Luis Ábalos, la consejera andaluza de Fomento, Marifrán Carazo, es partidaria de "promover nuevas viviendas en alquiler que amplíen la oferta donde más se necesita". De la misma opinión es el consejero de Vivienda y Administración Local de Madrid, David Pérez con quien se ha reunido hoy.
Considera Carazo que la propuesta intervencionista del Gobierno en alquiler de vivienda ha demostrado ser un fracaso en grandes ciudades europeas como París o Berlín.
En realidad, la promoción de vivienda pública es compartida por la izquierda, aunque es consciente, como lo es la derecha, que se trata de una política cuyos efectos tardan años en notarse.
Uno de los principales frentes comunes de ambas administraciones es la necesidad de mejorar y reforzar los convenios en materia de vivienda suscritos con el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, ya que éstos están dotados con pocos recursos económicos, en su mayoría procedentes de los convenios suscritos en el marco del Plan Nacional de Vivienda.
Cambiar la normativa
"Vamos a poner suelo público autonómico y vamos a incentivar a los ayuntamientos para que ofrezcan suelo para construir nuevas viviendas en alquiler", ha explicado la consejera de Fomento. La Consejería ya tiene en marcha un programa de Fomento del Alquiler con el que se van a construir 722 viviendas en Andalucía tras una inversión de 19,8 millones de euros en ayudas a promotores públicos y privados de siete provincias andaluzas.
David Pérez y Marifrán Carrazo han puesto el foco en el aumento del precio de la vivienda, afectando especialmente al alquiler, con precios previos a las crisis de 2007, así como la escasez de suelo y la rigidez de la normativa que regula el proceso de construcción de vivienda, a lo que se le suma la escasez e incentivos fiscales que faciliten a los ciudadanos el derecho básico de acceso a la vivienda, especialmente a los jóvenes y mayores de 65 años.
En este sentido la consejera de Fomento ha reivindicado que la Junta de Andalucía está poniendo en marcha el Plan Vive en Andalucía 2020-2030, que supondrá "un cambio en las políticas de vivienda en la comunidad andaluza". "Estamos trabajando para que las viviendas sean dignas y adecuadas y, por tanto, accesibles, promoviendo la rehabilitación, la eficiencia energética y la conservación y mantenimiento de las mismas en perfectas condiciones", ha manifestado Marifrán Carazo.
Protegidas y libres
La última medida puesta en marcha por la Consejería de Fomento ha sido la publicación de la orden que equipara el diseño y funcionalidad de las viviendas protegidas a las viviendas libres y agiliza los procedimientos de calificación al unir su concesión a la de la licencia de obras. Con ambas medidas, se busca favorecer y fomentar la promoción de vivienda pública.
"Se cambia el concepto de vivienda protegida, disipando las diferencias con la vivienda de promoción libre y adecuándolo a las necesidades de la sociedad actual y con ello haremos la vivienda protegida más atractiva tanto para los promotores como para las entidades financieras", ha apostillado la consejera.
