Este comentario de Isabel San Sebastián en Twitter, justo después del atentado de Barcelona, provocó la ira de algunos tuiteros que le recriminaron a la periodista el uso del témino islamista. A partir de ahí, la discusión fue en aumento. 

Además de la discusión sobre el término islamista -que según la Fundeu se refiere a quien propugna la aplicación de la ley islámica en la vida política-, los usuarios le recriminaron la utilización de la historia.