Joan Coscubiela, portavoz de Catalunya Sí que es Pot,  “48 horas negras” en el Parlamento catalán. Así definió el portavoz de Catalunya Sí que es Pot, Joan Coscubiela, las dos últimas sesiones de la cámara catalana en la que los independentistas han aprobado sí o sí las leyes para la creación de la nueva república catalana. Este jueves se ha repetido el mismo guión que se utilizó para la aprobación de la ley del referéndum: trámite exprés ignorando las protestas de la oposición en Pleno y el propio Consejo de Garantías Estatutarias, el tribunal constitucional catalán, que dictaminó que todos los grupos parlamentarios tenían derecho a reclamar un dictamen de cualquier ley que se tramitase en la Cámara. 

Con los votos a favor de Junts pel Sí (JxSí) y la CUP y en ausencia de los diputados de Ciudadanos, PSC y PPC, se aprobó al filo de la media noche la Ley de Transitoriedad, tras otro bronco y maratoniano debate parlamentario. Salió adelante con los 71 votos de JxSí y la CUP y 10 en contra de Catalunya Sí Que Es Pot, mientras que los diputados de Ciudadanos, PSC y PPC se asusentaron del hemiciclo como hicieron con la votación de la Ley del Referéndum. Además de JxSí y la CUP, también ha apoyado la ley el diputado no adscrito y excoseller de Justicia, Germà Gordó, pese a que ha reconocido que el texto "crea dudas jurídicas", es "mejorable desde el punto de vista técnico y jurídico" y habría sido "deseable una mayoría más importante para su aprobación".

"Hoy se vota sí o sí"

La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, volvió a hacer de agente de Junts pel Sí y la Cup e impuso la hoja de ruta independentista. En uno de los múltiples recesos de la jornada lo dijo muy claro: "Hoy se vota la ley sí o sí". En el lado contrario, los diputados de la oposición

La líder de Ciutadans, Inés Arrimadas, tachó la ley de "panfleto" que "atropella" el "sentido común", y criticó que los independentistas quieran pasar el "rodillo homogeneizador" sobre una Cataluña "plural y diversa". "Sean valientes, y díganlo. Saben que no pueden hacer el referéndum. Están poniendo en peligro el autogobierno de Cataluña", clamó Arrimadas, quien el miércoles anunció una moción de censura contra Puigdemont con el compromiso de convocar elecciones.

Modelo inspirado en Kosovo o Montenegro

Por su parte, el líder del PSC, Miquel Iceta lamentó que con esta ley se liquide la Constitución y el Estatuto de Autonomía para "sustituirlos por un modelo de escaso nivel democrático inspirado entre Kosovo o Montenegro". Además afeo a Junts pel Sí y la CUP su pretensión de crear un nuevo Estado por la "puerta de atrás", sabiendo que el referéndum no se va a celebrar. “Saben que no se celebrará el referéndum y que al menos quede alguna cosa en el boletín oficial del Parlament, aunque solo sea 48 horas. Pasar a la historia aunque solo sea con una nota a pie de página”, reprochó.

Iceta confirmó que los socialistas presentarán un nuevo recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional por la tramitación de esta ley, vulnerando los derechos de los diputados. El miércoles ya presentaron otro similar, con la aprobación de la ley del referéndum.

Y el PP sacó a Venezuela

El portavoz del PP, Alejandro Fernández definió la situación de una forma épica: "Estaremos defendiendo la libertad hasta que se congele el infierno". Mientras tanto, el líder del PP catalán, Xavier García Albiol,  habló de que los independentistas y el Govern quieren "imponer un modelo político y social mezcla entre bolivariano y régimen autoritario". Tachó la ley de "golpista" y el referéndum del 1-O de propagandista.

Coscubiela, durante su intervención, fue muy duro con la estrategia de Junts pel Sí y la CUP para aprobar de forma exprés las leyes de la nueva república catalana. "Se han pulido en 48 horas negras el capital del soberanismo y de la autoridad moral de la democracia, porque de forma irresponsable han decidido aplicar su estrategia" que ha acabado "deslegitimando" la reivindicación del referéndum, ha considerado el portavoz de las confluencias. "Qué gran irresponsabilidad, señor Puigdemont" (...). ¿Por qué han forzado tanto la máquina con una ley que es papel mojado. Es un error histórico", lamentó.

Entrada en vigor condicionada

Pese a su aprobación, la propia ley establece que sólo entrará en vigor si se celebra el referéndum convocado para el 1 de octubre y gana el 'sí' a la independencia. En ese caso, se crearía un marco legal alternativo al español, en el que Cataluña se constituiría en "una república de derecho, democrática y social", cuya "soberanía nacional radica en el pueblo de Cataluña" y cuyo "jefe de Estado" sería el presidente de la Generalitat.