Ricos más ricos y pobres más pobres. Ese es el peaje que están pagando los españoles por la forma de proceder del Partido Popular frente a la crisis. Así lo están denunciando estos días los diferentes sindicatos, que en una serie de informes ponen de manifiesto el aumento de la desigualdad en los salarios y entre las clases sociales en España.

Este lunes fue la Federación de Servicios Públicos de UGT la que denunció que los altos directivos de la Administración tendrán una subida del 3,4%. Hoy, Adecco, la CEOE y UGT han puesto de manifiesto la difícil realidad de los asalariados españoles. Eso sí, el Ministerio de Empleo continúa con su campaña del “qué bien va todo” al afirmar que los salarios han aumentado un 0,73% hasta julio.

Adecco, a través de su informe sobre retribuciones en España, ha señalado que un directivo cobra más del doble que un empleado. De hecho, el sueldo medio de un directivo corresponde a 2,6 sueldos de un “trabajador raso”. O lo que es lo mismo, hasta 30.000 euros más al año. La compañía ha constatado que en 2014 la remuneración media por persona asalariada fue de 31.755 euros, lo que supone una caída del 0,32% con respecto a 2013.

Las subidas salariales que cacarean los voceros del Gobierno quedan en entredicho en este informe, puesto que el 53% de las empresas asegura que congeló los salarios durante 2014, el 11% que los bajó, junto a un 3% que, además, ha reducido la retribución variable.

Adecco también ha sondeado a trabajadores y directivos para conocer su 'impresión' sobre las percepciones salariales de cada grupo. Resultado: discrepancias. Por un lado, el 75,88% de los empleados afirman que los directivos cobran de media entre 25.000 y 70.000 euros. La realidad es que el 64% de las empresas afirma pagar más de 70.000 euros anuales a este colectivo.

En el lado opuesto están los trabajadores. En este caso, el 82,1% de los empleados afirman que el sueldo base entre ellos es inferior a 18.000 euros anuales. Unos ingresos que sólo confirman el 57% de las empresas.

UGT ha realizado otro estudio en el que se descubre otra desigualdad creciente. Si ya existen diferencias entre un directivo y un empleado corriente, las diferencias salariales pueden llegar hasta un 40% entre un trabajador “adulto” y un joven que realizan el mismo trabajo.

Dicho organismo denuncia la situación de los jóvenes en el mercado laboral español, caracterizada por la temporalidad, la precariedad y los salarios bajos, y afirma que las medidas del Gobierno, como la reforma laboral, no hacen sino empeorar esta situación.

La CEOE también se ha sumado al desenmascaramiento del Ejecutivo español, y ha alertado sobre las grandes bajadas de salarios (hasta el 16% de recorte) que siguen sufriendo algunos convenios peses a la “recuperación”.