El juez Pablo Ruz tuvo que firmar el pasado martes una diligencia que ha preocupado a las acusaciones. Todos los acusados en el auto del magistrado de la Audiencia Nacional han recibido, como marca la ley, la resolución por la que se le encausa, y sus abogados la documentación sobre el caso para que puedan organizar sus defensas. Todos.., menos uno. O más exactamente dos.

Se trata de Guillermo 'Willy' Ortega, exalcalde de Majadahonda, y de su esposa, Gema Matamoros, de los que no constaba quién era su abogado hasta que en las últimas horas, y por la orden emitida por  el juez, se les ha designado por el colegio de Abogados de Madrid abogados de oficio. El temor en el juzgado que dirige hasta el final de esta semana Pablo Ruz, y también de las acusaciones, es que la no localización de estas dos personas pudiera afectar al desarrollo de la causa.

Guillermo Ortega, Willy 'el Rata' para Correa, en la foto oficial de sus tiempos como alcalde de Majadahonda



Guillermo Ortega se apuntó desde el comienzo como uno de los personajes clave en la Gürtel madrileña. Alcalde de Majadahonda, uno de los municipios más ricos del cinturón norte de Madrid, 'Willy, la Rata', como le denominaban Correa y su círculo, era un hombre de enorme importancia para la trama. Tanto, que el capo de la trama colocó a su propia mujer, Carmen Rodríguez Quijano como jefa de gabinete de Willy Ortega para asegurarse que el alcalde, al que también se referían como "cabeza de mosquito" tuviera claro lo que debía hacer: concesiones, recalificaciones, permutas de terreno...

A cambio, según los informes policiales, Willy Ortega y su esposa fueron mimados por la trama: cientos de miles de euros que se concretaron en la compra de una residencia de lujo en el municipio que regían... Además de 39 automóviles, que llegó a tener la pareja, así como decenas de viajes (tantos que incluso llegaron a incluir a su servicio doméstico), cruceros incluidos, trajes, bolsos de lujo.., hasta abonos para asistir al fútbol.

En realidad, encontrar a Gema Matamoros, a la que Ruz acusa en la misma condición que a Ana Mato como 'partícipe lucrativa' de las acciones de su marido, ya presentó problemas cuando el juez cerró el auto, y realizó el primer escrito ordenando que se procediera a "realizar diligencia urgentes para su localización".